Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Sábado 1 de febrero de 2003
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Cultura
REPORTAJE /MILENARIA TRADICION POPULAR

Se hacen diseños a petición de los clientes

Cuarenta vestimentas en nueve tallas

Casa Uribe combina espíritu y pragmatismo

ARTURO JIMENEZ

Con casi tres décadas de existencia, en la actualidad Niños Uribe, ''la casa de los Niños Dios", es considerada ''la primera" en su ramo entre decenas de pequeños productores.

Algunos datos de su éxito: cuenta con tres edificios y cinco tiendas en la calle de Talavera, en los que se diseñan, fabrican y venden al mayoreo los pequeños trajes de tela y los más de 900 accesorios de plástico, latón y otros materiales.

Además, mantiene una planta fija de 20 trabajadores y en temporada alta, como ahora, contrata 40 eventuales, además de los siete familiares que cumplen responsabilidades específicas. También edita, desde hace cinco años, una revista anual con un tiraje de 22 mil ejemplares que vende a 20 pesos cada uno.

Empresa familiar

El éxito de la casa Uribe, fundada en 1975, no ha sido fácil. ''Comenzamos con un puesto en la calle, con pocos modelos, y hoy tenemos casi 40 vestimentas diferentes del Niño Dios", rememora Saúl Uribe, cabeza de esa empresa familiar que, sin problema, combina las cosas del espíritu con el pragmatismo.

''Esas vestimentas aumentaron por voluntad propia de nuestros clientes. Cada año ponemos un buzón de sugerencias y ellos nos indican de qué Niño quieren que se haga su vestimenta. Luego se investiga si ese Niño realmente existe en un poblado o barrio.

''Y si creemos que el modelo será aceptado en la comunidad, entonces procedemos a diseñar su vestimenta y sus accesorios, ambos en las nueve tallas que manejamos, de la 10 a la 45."

Explica que la tradición original es que el primer año los padrinos vistan de blanco al Niño Dios, con el traje de ropón o de Niño de las Palomas, y se presente a bendecir acostado.

El segundo año, prosigue, se lleva parado y vestido según la fe particular, ''por ejemplo de San Juditas Tadeo". Y el tercer año, de igual manera, aunque se presenta ''sentadito en un trono y con una corona, porque ya es un rey".

Recuerda que antes de la producción masiva, las vestimentas eran hechas de manera casera por los propios creyentes. ''Luego iban a las calles de Venustiano Carranza a comprar los accesorios."

Aportaciones para la infancia

Uribe comenta que los Niños Dios de yeso, los que más se utilizan, se fabrican en Tlaquepaque, Jalisco; en Tlayacapan, Morelos, y en otros poblados. En la ciudad de México, agrega, se encuentran desde principios de noviembre hasta el 16 de diciembre en avenida Congreso de la Unión y Fray Servando.

Como ahora casa Uribe tiene utilidades, ha decidido aportar recursos a organizaciones en favor de la infancia, como la Cruz Blanca, y a concursos como el de Viste tu Niño Dios, el cual promueve con el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
 



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