REPORTAJE /MILENARIA
TRADICION POPULAR
Se hacen diseños a petición de los
clientes
Cuarenta vestimentas en nueve tallas
Casa Uribe combina espíritu y pragmatismo
ARTURO JIMENEZ
Con casi tres décadas de existencia, en la actualidad
Niños Uribe, ''la casa de los Niños Dios", es considerada
''la primera" en su ramo entre decenas de pequeños productores.
Algunos datos de su éxito: cuenta con tres edificios
y cinco tiendas en la calle de Talavera, en los que se diseñan,
fabrican y venden al mayoreo los pequeños trajes de tela y los más
de 900 accesorios de plástico, latón y otros materiales.
Además, mantiene una planta fija de 20 trabajadores
y en temporada alta, como ahora, contrata 40 eventuales, además
de los siete familiares que cumplen responsabilidades específicas.
También edita, desde hace cinco años, una revista anual con
un tiraje de 22 mil ejemplares que vende a 20 pesos cada uno.
Empresa familiar
El éxito de la casa Uribe, fundada en 1975, no
ha sido fácil. ''Comenzamos con un puesto en la calle, con pocos
modelos, y hoy tenemos casi 40 vestimentas diferentes del Niño Dios",
rememora Saúl Uribe, cabeza de esa empresa familiar que, sin problema,
combina las cosas del espíritu con el pragmatismo.
''Esas vestimentas aumentaron por voluntad propia de nuestros
clientes. Cada año ponemos un buzón de sugerencias y ellos
nos indican de qué Niño quieren que se haga su vestimenta.
Luego se investiga si ese Niño realmente existe en un poblado o
barrio.
''Y si creemos que el modelo será aceptado en la
comunidad, entonces procedemos a diseñar su vestimenta y sus accesorios,
ambos en las nueve tallas que manejamos, de la 10 a la 45."
Explica que la tradición original es que el primer
año los padrinos vistan de blanco al Niño Dios, con el traje
de ropón o de Niño de las Palomas, y se presente a bendecir
acostado.
El segundo año, prosigue, se lleva parado y vestido
según la fe particular, ''por ejemplo de San Juditas Tadeo". Y el
tercer año, de igual manera, aunque se presenta ''sentadito en un
trono y con una corona, porque ya es un rey".
Recuerda que antes de la producción masiva, las
vestimentas eran hechas de manera casera por los propios creyentes. ''Luego
iban a las calles de Venustiano Carranza a comprar los accesorios."
Aportaciones para la infancia
Uribe comenta que los Niños Dios de yeso, los que
más se utilizan, se fabrican en Tlaquepaque, Jalisco; en Tlayacapan,
Morelos, y en otros poblados. En la ciudad de México, agrega, se
encuentran desde principios de noviembre hasta el 16 de diciembre en avenida
Congreso de la Unión y Fray Servando.
Como ahora casa Uribe tiene utilidades, ha decidido aportar
recursos a organizaciones en favor de la infancia, como la Cruz Blanca,
y a concursos como el de Viste tu Niño Dios, el cual promueve con
el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
Una historia en tres imágenes: de la restauración
a la fiesta por el Día de La Candelaria FOTOS ALFREDO DOMINGUEZ