México no flexibilizará su ley laboral al estilo FMI, afirma el secretario de Trabajo
Falta mucho en el mercado interno, pero vamos en el camino correcto: Abascal
Pide "no pronosticar desastres ni crear pánico entre los inversionistas que afecte al país"
LAURA GOMEZ FLORES
México no flexibilizará su ley laboral al estilo del Fondo Monetario Internacional (FMI) porque cuenta con su propio modelo, que es eminentemente social y está a tono con el artículo 123 constitucional, afirmó el secretario del Trabajo y Previsión Social, Carlos Abascal Carranza, al convocar a los analistas a "no pronosticar desastres ni crear pánico entre los inversionistas que afecte al país, cuando lo más importante es alcanzar la meta prevista".
Los factores externos no son controlables y dependen de otras decisiones, pero debemos tener la capacidad en el mercado interno de reaccionar frente a este tipo de acontecimientos sin vivir espantados. "No podemos sentarnos en una sillita esperando que se nos venga el mundo encima en presiones inflacionarias o recesiones, pues al hacerlo nos va a cornear el toro, cuando se trata de, sin negar esos fenómenos, hacer lo que nos toca", señaló.
En su participación en la reunión privada de la Asociación de Secretarios de Desarrollo Económico, reconoció que aún falta mucho por hacer en el mercado interno, como la integración de cadenas productivas, generación de empleo, otorgamiento de crédito, combate a corrupción y contrabando, pero "vamos en el camino correcto, pues de otra manera no tendríamos capacidad de conducir nuestro propio destino y eso no lo acepto".
Por ello la necesidad de lograr una reforma laboral. La propuesta de la dependencia y otras organizaciones sindicales fue convertida en iniciativa de ley, por parte de las fracciones de PRI, PAN y PVEM, en diciembre pasado, y su concreción permitiría eliminar los periodos de prueba, castigar a los empleadores que discriminen a los solicitantes y suprimir la obligación de meter los programas de capacitación a revisión en la secretaría, aunque continuará la supervisión.
Mientras surge una respuesta favorable en este tema, se buscará la conformación de una Asociación de Secretarios de Trabajo, con miras a planificar las acciones a seguir y cubrir las prioridades de empleo con un sentido más humanista y no liberal, que representa un "apagafuegos de los conflictos, sobre todo, cuando contamos con menos presupuestos y nuestra prioridad es reducir la tasa de desempleo abierto", señaló.
El funcionario mencionó que, de manera paralela, se trabajará en la definición jurídica de las juntas federal y locales de conciliación cuyas decisiones muchas veces son de naturaleza política. Independientemente de si deben o no estar en el Poder Judicial, se requiere que actúen con autonomía jurisdiccional, porque, en estos momentos, están "muy sueltas".
"Estamos en una transición, pues después de 70 años se dio un cambio de sistema político y tenemos que estar de acuerdo en el modelo de Estado que queremos; hay muchas voces que antes no participaban y ahora lo hacen, no nos impacientemos, y en vez de agredirnos y herirnos unos a otros, lo que debemos hacer es encontrar caminos y soluciones comunes que permitan a México alcanzar sus metas", abundó.
Por ello la determinación de no flexibilizar la ley laboral y, en caso de modificar el sistema de indemnización, contar con un mecanismo de protección, de seguro de desempleo, mucho mejor que el de indemnización, aunque hoy ni los empresarios ni el gobierno ni los trabajadores tienen el dinero para financiar un seguro de desempleo que sea de ahorro, tipo Afore, y no estilo otros países, donde es un aliciente.