La confederación reconoce efectos de la devaluación en la economía nacional
Concamin: no habrá crecimiento ni empleo en la industria durante el primer semestre
Hay ramas que dependen casi totalmente de insumos importados, afirma Halkin Bider
DAVID ZUÑIGA
El primer semestre de 2003 está prácticamente perdido para la industria, que descarta cualquier mejoría o generación de empleo hasta la segunda mitad del año, reconoció el viceprensidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), León Halkin Bider, quien reconoció que la devaluación del peso sí le causa problemas al sector, pues hay ramas que dependen casi totalmente de insumos importados.
El empresario señaló que las empresas mexicanas no podrán compensar el aumento de costos con un alza de precios, pues corren el riesgo de perder mercado ante las mercancías de importación. Además, "hemos sentido una baja importante en el consumo interno y sabemos que la producción bajó porque en diciembre no hubo los pedidos que se esperaban".
Quien será el nuevo presidente de la Concamin a partir de marzo señaló que esta confederación deberá trabajar con todas sus cámaras para encontrar la forma de reactivar el mercado interno y presionar a los gobiernos federal y estatales para que se ejerzan a tiempo los presupuestos para compras y obras públicas.
Halkin Bider aseguró que hay industrias, como la del vestido, que tienen que trabajar a 50 por ciento de su capacidad o llegar a acuerdos con los trabajadores para suspender actividades uno o dos días a la semana con tal de evitar el cierre de empresas, situación que no tiene visos de mejorar, al menos durante el primer semestre de 2003. "Estamos resintiendo un año que resultó más difícil de lo que esperábamos. Preferimos un paro técnico a que se pierdan empleos o una industria. Para crear empleos hay que consentir a los empleadores, porque si no se acaba el país".
Interrogado sobre las advertencias de la Cámara Nacional de Comercio en pequeño (Canacope) acerca de que la devaluación del peso provocará un aumento de precios de entre 5 y 10 por ciento, Halkin señaló: "No se deben tomar ventajas ilegítimas de la situación internacional. Hay mercancías en las cuales la cotización del peso no incide en costos adicionales. Esperemos que esto sea momentáneo y que los inventarios aguanten, porque si vamos a vender caro no habrá quién lo consuma, y 2003 será un año de oferta, más que de demanda".
En cuanto al empleo, reconoció que si el sector logra mantener la planta productiva y se obtiene algún crecimiento en el segundo semestre será "muy alentador".