El mundo necesita soluciones desde las ciudades
y desde el pensamiento, considera
La producción cultural es el eje de una ''nueva
economía'': Mascarell
Vaticina el concejal del Ayuntamiento de Barcelona que
el libro continuará como el principal instrumento para transmitir
conocimientos La lectura es racionalidad, sostiene
ARTURO GARCIA HERNANDEZ
Las innovaciones tecnológicas y sus múltiples
aplicaciones han hecho surgir un tipo de economía cuyo eje es la
producción cultural, en la que el trabajo intelectual es el capital
más importante. Esta ''nueva economía" se fundamenta de manera
esencial ''en los contenidos, en la generación y transmisión
de conocimientos". Esto sostiene Ferrán Mascarell, concejal de Cultura
del Ayuntamiento y presidente del Instituto de Cultura de Barcelona, ciudad
que en los pasados 15 años se ha transformado de centro industrial
en un importante espacio de producción cultural, en el sentido más
amplio del término.
La experiencia barcelonesa ejemplifica esa ''nueva economía"
-expresa Mascarell en entrevista, durante una breve estancia en México-
y muestra de qué manera ''la cultura es imprescindible en cualquier
proyecto de desarrollo urbano actual. Nosotros partimos de la constatación
de que la cultura es un conjunto cada vez más amplio de realidades,
es creatividad, pero en un sentido amplio también es valores de
convivencia, innovación, diseño correcto del espacio urbano.
''Por tanto, todas estas cuestiones plan-teadas como problemáticas
tienen soluciones esencialmente culturales. La cultura no son sólo
las bellas artes, no es únicamente algo suplementario o complementario
de lo que sucede en los procesos urbanos, sino que está en el centro
de los mismos, en la medida en que toda metrópoli es en sí
un proyecto cultural. Si a la ciudad no se la piensa, no funciona bien.
Desde la ciudad concebida como proyecto cultural, lugar donde lo cultural
y lo urbano se encuentran, es desde donde nosotros estamos intentando trabajar:
pensamos que el mundo necesita soluciones desde las ciudades y desde las
culturas."
Búsqueda del capital intelectual
-Este
concepto de cultura de qué manera encaja en lo que usted llama una
nueva economía.
-Esa nueva economía se fundamenta esencialmente
en los contenidos, más que en los soportes. Nuestras ciudades están
transitando de espacios que tenían entornos industriales a espacios
con economías blandas esencialmente, es decir, fundadas en la generación,
transmisión y movilidad de los datos, del conocimiento, ya no en
la producción en el sentido industrial e histórico.
A decir de Mascarell -ex director de la revista L'Avenc
y director del posgrado en Gestión y dirección de instituciones,
empresas y plataformas culturales de la Universidad Pompeu Fabra- las ciudades
que aspiran a la prosperidad y el bienestar social, ''buscan a los creadores,
a los innovadores, al capital intelectual que cada vez es más importante
que el capital económico".
-A simple vista parece que impulsar algo así requiere
de una comunidad o de una sociedad próspera de antemano.
-Evidentemente una economía del conocimiento sólo
se puede montar desde un espacio que ya ha transitado por algunas estaciones
de los procesos económicos contemporáneos. Sin embargo, no
es algo absolutamente imprescindible, lo imprescindible es la voluntad
política de hacerlo.
''Por ejemplo, algunas ciudades de la India han conseguido
generar economías nuevas, producir contenidos, mediante Internet
sin pasar por un estadio previo. Lo cierto es que, para fructificar, las
nuevas economías necesitan un entorno abierto, democrático
y con cierta calidad de vida.''
-El financiamiento que hace posible este tipo de economía,
¿es público o privado?
-En Barcelona, por ejemplo, hay todo un barrio que hemos
llamado ''Barcelona 22 @", cientos de hectáreas que el ayuntamiento
ha puesto a disposición de empresas productoras de contenidos. Es
necesariamente la iniciativa privada la que tiene que invertir, lo que
el ayuntamiento hace es crear las condiciones adecuadas para que esto funcione.
Omnipresencia de la imagen
-En este esquema, ¿dónde queda el libro,
alrededor del cual ha girado la cultura durante siglos?
-Y seguirá girando. El libro será en el
futuro, como ahora o más que ahora, el instrumento principal de
transmisión de conocimientos. Es verdad que las generaciones anteriores
a la omnipresencia de la imagen construían el pensamiento de una
manera distinta. Ahora, la televisión ha creado un pensamiento distinto,
más de impresiones, menos ordenado, es decir, más impresionista.
''Creo que en los próximos decenios ambos pensamientos
van a coexistir, pero revalorizando el papel de la lectura, porque la lectura
es racionalidad y la razón es imprescindible para comprender un
mundo francamente complejo. Es menos ordenado, menos lineal, más
impresionista.''
Ferrán Mascarell estuvo en México para dictar
-la tarde de ayer en Bellas Artes- la conferencia La cultura como motor
de las ciudades, organizada por la Editorial México Interactivo
y la asociación civil Compás Condesa.