Por vez primera en la historia 11 partidos aparecerán en las boletas el 6 de julio

Tres nuevas fuerzas políticas, tras la supervivencia en el mercado electoral

Conflictos internos, iregularidades y acrobacia ideológica marcan a la triple oferta de 2003

RENATO DAVALOS

Abierto el telón de la pirotecnia electoral que culminará el 6 de julio, tres nuevas voces partidistas -Partido Liberal Mexicano, Fuerza Ciudadana y México Posible- buscarán un rincón de 2 por ciento cada uno en la preferencia ciudadana que les permita la supervivencia. Tres ofertas al mercado electoral que llegan ya con conflictos internos, irregularidades y algunos personajes marcados por la acrobacia ideológica que les llevó de un trapecio político a otro. Eso sí, con 91 millones de pesos para gastos y el precedente de los negocios familiares en que se han convertido algunas de las fuerzas emergentes, al amparo de las rendijas del código electoral.

Los catálogos electorales de los tres nuevos partidos que harán converger en la boleta electoral a 11 partidos -cifra máxima en el historial político del país-, en la contienda que renovará la Cámara de Diputados y seis gubernaturas este año, se repiten los grandes objetivos nacionales: combate a la pobreza, igualdad, justicia, seguridad pública y "lucha sin cuartel" contra narcotráfico y crimen organizado. Algunos, como México Posible, tratarán de atraer los reflectores con propuestas para despenalizar el aborto y el consumo de mariguana.

Diez asambleas estatales y 77 mil afiliados configuran las "cifras mágicas" para crear un partido político y acceder al presupuesto. En el mapa político actual el Partido de la Sociedad Nacionalista, tiene ya averiguaciones en la Procuraduría General de la República (PGR) por presunto uso indebido de los recursos públicos y la eventual pérdida del registro.

La fórmula para crear un partido no es tan compleja. Poco más tres millones de pesos para atraer a unos 77 mil ciudadanos con rifas, repartos de despensas, etcétera. A cambio reciben un financiamiento que este año será de 91 millones de pesos. Si se pierde el registro, no hay mecanismos legales para saber qué destino tienen oficinas o infraestructura ni tampoco muchos recursos legales para escudriñar a fondo el uso de recursos públicos.

El Código Federal de Procedimientos Electorales (Cofipe) prevé para las nuevas fuerzas políticas un presupuesto de 2 por ciento del gasto total del IFE, hoy de 48 millones de pesos. En año electoral como este, la cifra se duplica.

Trasiego político

Salvador Ordaz Montes de Oca es un masón que encabeza el Partido Liberal Mexicano (PLM). En 2001 impulsó el Frente Liberal, que perdió entonces el registro como asociación política nacional. Ex líder de la Gran Logia el Valle de México, Ordaz encabezó ese grupo hasta que le fue suspendido su registro por irregularidades en su contabilidad que debió reportar al Instituto Federal Electoral (IFE).

Ahora se presenta en este partido, que pretende rescatar los "principios juaristas" olvidados por el gobierno foxista. En la oferta en esta industria electoral, propone un programa nacional contra la pobreza. Aventura para el marketing, que en tres años se reduciría a la mitad la pobreza extrema. Sin más, plantea destinar a ese objetivo dos terceras partes del ingreso petrolero excedente.

Tres por ciento de déficit público, reforma laboral que permita la "recuperación salarial", respeto a los usos y costumbres indígenas, aunque "siempre y cuando no se afecte la ley" y muy pocos cómos para alcanzar esas metas, conforman el ofrecimiento de este grupo de liberales. Eso sí, en previsión, pedirán "relección inmediata de legisladores" y la separación Iglesia-Estado, trastocada en la administración foxista.

Jorge Alcocer ha trasegado en la política del Partido Comunista a las filas priístas, donde fue funcionario y asesor primordial del derrotado candidato presidencial Francisco Labastida en 2000. Hoy se presenta al frente de Fuerza Ciudadana. También ex legislador por la izquierda, antes de su irrupción en el priísmo, logró ya el registro de su partido. A su llegada al consejo general del IFE pidió que no se discutiera el caso Amigos de Fox ni el Pemexgate, ocurrido cuando estaba junto a Labastida.

Una vez que le negaron el registro inicial porque no le validaron varias asambleas estatales e incumplió con el número de afiliados requerido, pudo obtener el registro de Fuerza Ciudadana. Buscó la alianza con el PRI, pero al no encontrarla anunció que "irán solos" a los comicios del 6 de julio.

Presume presencia en 27 estados y censura a los "tres viejos partidos que no han sido capaces de dar al país una ruta de acuerdos". Públicamente, reconoció que gana 42 mil pesos como dirigente de Fuerza Ciudadana; en su plataforma electoral plantea enunciados para "alcanzar la igualdad social"; exige mayor pago de impuestos a quienes más tienen, y en materia eléctrica desliza que la inversión privada es necesaria, pero "regulada por el principio de soberanía".

A México Posible lo lidera Patricia Mercado, quien se asume como una feminista, pero cuando aún no empiezan las campañas formales, ya tiene que hacer frente al éxodo de casi mil militantes, que la acusaron de un manejo no transparente de los recursos públicos. Entre ese grupo que dejó la filiación, figura Elena Tapia, actual delegada en Iztacalco.

Cuando encabezó la agrupación Diversa hace años, Mercado fue señalada por el IFE por el incumplimiento de requisitos legales en la comprobación fiscal que derivó en varias multas. En la búsqueda de un espacio en el mercado electoral, plantea en su plataforma la despenalización del aborto, oposición a la pena de muerte, igualdad de las mujeres, diversidad sexual y permisividad en el consumo de mariguana.

México Posible se asume no como la "izquierda repetitiva"; no apoya la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América el Norte, sino la búsqueda de "fondos de compensación" con los socios comerciales.

El partido no ha perdido el rumbo, dijo recientemente el analista Sergio Aguayo, uno de los principales dirigentes de México Posible, quien hace tiempo, cuando estaba en Alianza Cívica fue señalado por haber recibido recursos del Partido Republicano estadunidense.

Este partido alberga a varios personajes que agrupó Socialdemocracia, el fallido partido de Gilberto Rincón Gallardo. Entre ellos, Ricardo Raphael de la Madrid, pariente del ex presidente Miguel de la Madrid. También a Ricardo Becerra, ex asesor de José Woldenberg, presidente del IFE.

Recientemente llegaron los Pascoe. Ricardo, ex embajador de México en La Habana, a quien ya perfilan a la candidatura para una delegación política citadina, y su hijo Luciano, incrustado en la directiva partidista.