La película, dirigida por Curtis Hanson, se estrena hoy
Muestra 8 Mile/Calle de las ilusiones, raíces y sentimientos de Eminem
JORGE CABALLERO
Sobre la superficie de Detroit hay una larga historia de expresiones artísticas creadas bajo presión, gran parte de ellas se expresan por medio de la música. Desde el sonido motown que dominó la música popular en los años sesenta, a la música evangélica de Aretha Franklin y el sonido de Detroit de rocanroleros como Mitch Ryder, Bob Seger y MC5, la música de la ciudad siempre ha provenido de las entrañas de la clase obrera, una expresión auténtica de las realidades de su vida. El mundo musical hip hop no es la excepción y ahí surgió Eminem, quien ha declarado: "Soy un blanco en una música iniciada por negros, pero no creo que necesites tener algún color especial en tu piel para poder decir la mierda que pasa en la sociedad".
Y no es de gratis que este blanco nacido en Kansas City y crecido en Detroit haya reunido, a su corta edad, las vivencias de un joven que tiene que mudarse de casa constantemente... La vida y obra, sólo parcialmente, de Eminem se refleja en la 8 Mile/ Calle de las ilusiones, que se estrena hoy en nuestro país. La cinta está dirigida por Curtis Hanson, ganador del Oscar y director de Los Angeles al desnudo y Un loco fin de Semana.
8 Mile/Calle de las ilusiones es protagonizada por Eminem, Kim Basinger, Brittany Murphy, Mekhi Phifer, Omar Benson Miller y Evan Jones. Esta es una de las películas más exitosas de la actual temporada en Estados Unidos y Canadá, recaudó 111 millones de dólares durante sus primeras cinco semanas de exhibición y ha recibido varias críticas positivas; la revista Enterartainment Weekly la calificó como "...enérgica y electrizante...". La Rolling Stone (la original, no sus copias mal hechas) mencionó: "...se convierte en un acontecimiento cinematográfico al explorar las raíces de Eminem y la furia y sentimientos que dan forma a su música rap...".
Ante la ausencia de una vida familiar normal, Jimmy (Eminem) y sus amigos Future (Mekhi Phifer), carismático y audaz; Sol (Omar Benson Miller), optimista y soñador; DJ IZ (D'Angelo Wilson), activista político en ciernes y cheddar Bob (Evan Jones), lento pero seguro, han creado su propia familia. Jimmy y su equipo (Three One Third) viven esperando "obtener una buena oportunidad muy pronto", mientras luchan para sobrevivir en sus trabajos miserables y navegan los campos minados de sus turbulentas relaciones personales. Tal y como lo dice Jimmy con franqueza: "todos somos más pobres que el carajo y vivimos en las casas de nuestras madres".
El mundo de los clubes de hip hop de Detroit es bien conocido por Eminem, quien dice: "Recuerdo que si perdía un encuentro, era como si todo mi mundo se hubiera derrumbado. Muchos me decían, 'ƑCuál es el problema? Supéralo. Perdiste, inténtalo otra vez'. Pero yo sentía como si toda mi vida se hubiera acabado. Es una competencia. Es como un deporte que significa más que la misma vida para quien participa. Puede parecer una tontería a muchas personas pero para nosotros, es nuestro mundo".
Para el director Curtis Hanson, 8 Mile/Calle de las ilusiones fue una oportunidad de explotar nuevamente un estrato diferente de la cultura popular estadunidense, de quitar sus capas y mirar a las personas que luchan para sobrevivir: "Vemos un mundo poco conocido o estudiado en el cine o en los programas de noticias: el sector pobre de Estados Unidos que intenta triunfar legítimamente en los barrios más apartados y miserables de las grandes ciudades. La población de Detroit conoce la Milla 8 como un límite, una frontera, una línea divisoria en la ciudad".
Para el personaje de Jimmy, la Milla 8 es la línea divisoria sicológica que lo separa a él, de quien quiere ser y de lo que desea ser. Si lo pensamos detenidamente, todos tenemos una Milla 8 en nuestras vidas".
A pesar de que los personajes y la trama de 8 Mile/Calle de las ilusiones son ficticios, Eminem conoce muy bien el mundo de Jimmy Smith Jr.: "La milla 8 separa la ciudad de los suburbios. Si eres un rapero, crecer en el sector de Detroit en vez del sector suburbano te da credibilidad. Es algo importante. Pero si no escuchas la música hip hop, si no te interesa, no es algo trascendental. Pero para los que forman parte de este mundo, sí lo es".
La meta de Hanson fue hacer un cinta auténtica. "Quise que fuera real. Natural. Casi como un documental. Me encantó explotar el mundo en que se desarrolla esta trama y quise que los espectadores sintieran que verdaderamente entraban en ese mundo".