ASTILLERO

Julio Hernández López

Las visitas

Alharaca por Giuliani; rutina sin canciller para Ahern
De los Amigos de Fox a los Amigos de Venezuela

HAY DE visitas a visitas. La de Rudolf Giuliani pareció de Estado, con un Marcelo Ebrard convertido en solícito guía de turismo policiaco de lujo, mientras el primer ministro de Irlanda, Bertie Ahern, cumplía con una agenda protocolaria de pocos reflectores, en la que ni siquiera hubo secretario mexicano de Relaciones Exteriores que acompañara al presidente Vicente Fox en el programa del día, increíble y penosamente atado el jefe del Estado mexicano a respetar los tiempos de relevo fijados por quien formalmente sigue siendo el canciller (y que dejará el cargo mañana, aunque ya esté dedicado a dar conferencias a título personal en el extranjero), incapaz siquiera de instalar ya en su oficina al sustituto designado cuando menos para no dar espectáculo de desorden frente al visitante en turno. El visitante del día fue, pues, Giuliani, el carísimo asesor salvífico que ayer mismo dijo, chamánico, haber "sentido" la inseguridad de los chilangos en el paseo espectacular que casi en andas le organizó el gobierno capitalino por los puntos rojos del mapa delictivo local, antes de reunirlo con los personajes del gran dinero que pagarán los servicios privados de quien fue alcalde neoyorquino violador de derechos humanos a cuento de tolerancias cero.

MÉXICO EN dos versiones: la del país maravilloso que el Presidente de la República describió en conferencias de prensa y discursos ante el distinguido visitante (un México sin la parálisis política que las corredurías Merril Lynch y Bear Stearns aseguran existe, y que les ha hecho recomendar a sus clientes que busquen otros países para hacer inversiones; un México, según San Vicente, con una gran fortaleza económica), y el país en riesgo, entrampado, con un panorama futuro difícil, un alto grado de incertidumbre, muchos problemas para la creación de empleos y una recuperación económica totalmente dependiente de la de Estados Unidos, según el certero aguafiestas en que se ha convertido el gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz, quien ayer hizo esas predicciones sombrías en un foro organizado por el ITAM, y cuyos sudores analíticos han generado invariablemente enojo del presidente de Foxilandia que luego se convierten en domesticados reconocimientos de que el distinguido economista priísta había dicho verdades incómodas. La visita del premier irlandés a nuestro país le permitió al presidente Fox, por otra parte, dar a conocer la constitución de una nueva organización de amigos, no para recibir financiamiento del extranjero, como la que entre otros le organizó de manera destacada Luis Ernesto Derbez, con el Instituto Internacional de Finanzas que sirvió para triangulaciones tramposas, sino los Amigos de Venezuela, mediante los cuales un grupo de países latinoamericanos buscará ayudar a que la situación en el país gobernado por Hugo Chávez encuentre alguna salida que permita a Estados Unidos desatar guerras contra Irak y contra quien se acumule esta semana, sin andarse preocupando por suministros petroleros de urgencia.

DE VISITA por el extranjero andan también dos distinguidos hombres del foxismo: uno, el formalmente todavía canciller Jorge Castañeda, que fue a Nueva York para participar en un foro con Bill Clinton (ojalá el siempre activo Jorge haya tenido oportunidad de pedirle asesoría al ex presidente de Estados Unidos para que Brozo tenga éxito en la selección de la becaria con que suplirá a su secretaria que no tenía ni para qué hablar), y otro, Julio Frenk, que aun cuando físicamente se mantenga en suelo patrio, su pensamiento y atención viajan por el extranjero en busca de la dirección de la Organización Mundial de la Salud, que se elegirá este mes (los candidatos más viables son tres, entre ellos el mexicano, aunque los vaticinios apuntan más hacia el primer ministro de Mozambique, Pascoal Mocumbí). Castañeda, a quien defiende con ardor su amiga Elba Esther, avivando la especulación de que ambos podrían coincidir en San Lázaro, en un giro que buscaría sumar indirectamente curules no panistas a la necesidad foxista de contar con mayoría diputadil para la aprobación de sus propuestas reformistas estratégicas. Frenk, al que de pronto le ha saltado el escándalo de las muchas muertes de niños que en hospitales chiapanecos ha habido y que según las autoridades estatales tendrían causas reportadas oportuna e insistentemente ante las autoridades sanitarias federales desentendidas de los problemas sustanciales de su materia como de muchas otras cosas.

VISITAS NO hechas como la de Carlos Jonguitud Barrios a la fiscalía indagadora de crímenes políticos. Según la versión dada por los personeros de quien alguna vez se consideró dirigente "vitalicio" de la ahora difunta Vanguardia Revolucionaria del magisterio, el profesor y licenciado estaría "delicadísimo" de salud y por ello no pudo entrarle al asunto de sus acusaciones, luego retiradas, contra la primera maestra del país, a quien llegó a responsabilizar de la autoría intelectual de asesinatos de disidentes del cacicazgo sindical que él ejercía y luego le arrebató quien él llamaba La flaca.

PERO TODAS esas visitas le parecen a este escribano meros desplazamientos sin encanto ni fascinación, al enterarse de que el supermercado al que la señora Marta acudió el lunes anterior para hacer sus compras y dejar el cambio para beneficio educativo de niños pobres, se realizó šen el hotel Nikko!, donde fue colocada una caja registradora para que la presidenta de la fundación Vamos México comprara una botella de aceite, una bolsa de arroz, un kilo de frijoles negros (nada de discriminación) y una lata de chiles serranos. El total de la operación fue de 39.30 pesos, por lo cual la señora Marta dejó 10 pesos con 70 centavos de donativo en el carísimo hotel de Polanco.

ASTILLAS: GANAS DE perder el tiempo, de gastar el dinero público y de jugarle al tío Lolo: según comentó a esta columna una fuente de Los Pinos altamente confiable, la oficina de Francisco Ortiz Ortiz, el encargado de la imagen del Presidente, ordenó hacer una encuesta nacional para valorar el impacto político que en favor de Andrés Manuel López Obrador habría tenido la muerte de su esposa, Rocío Beltrán... Por cierto, el presidente Fox presentó oportunamente sus condolencias al jefe del gobierno capitalino, exploró la posibilidad de presentarse en persona para acompañar al tabasqueño y tuvo la sensibilidad suficiente para entender que Andrés Manuel deseaba estar alejado de cualquier formalidad política en esos momentos dolorosos... Y mientras el Presidente se reúne con el anticastrista Oswaldo Payá, para demostrar que el apoyo a la disidencia cubana no era asunto nada más de Castañeda, hasta mañana, en esta sección que está analizando la selección mexicana de futbol hecha por Ricardo Lavolpe.

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