Indice elaborado por la consultora internacional A.T. Kearney
México, débil ante la globalización
VICTOR CARDOSO
La caída del comercio internacional, bajo nivel de conectividad y de inversión en el extranjero, así como escasa participación en las misiones de paz de Naciones Unidas en Medio Oriente, se presentan como las principales debilidades de México en el camino hacia la globalización.
De acuerdo con el último Indice de Globalización, realizado por la consultora internacional A.T Kearney, México subió una posición al ubicarse en el lugar 49 de una lista de 62 países por debajo de Chile, Panamá y Argentina, pero arriba de Brasil, Colombia, Perú y Venezuela.
Las fortalezas del país que le permitieron avanzar una posición en el Indice de Globalización fueron sus niveles de inversión extranjera, turismo, tráfico telefónico e integración política, dijo Ricardo Haneine, director general de A.T. Kearney México.
De acuerdo con el estudio, realizado de manera conjunta con la revista Foreign Policy, Irlanda se mantiene por segundo año consecutivo como el país más globalizado.
El Indice Anual de Globalización, que en este caso corresponde a 2001, mide el nivel de integración económica, social, política y tecnológica de 62 países que representan 85 por ciento de la población en el mundo y más de 95 por ciento del producto mundial.
En conferencia de prensa, Haneine, precisó que entre las conclusiones del estudio se puede mencionar que la globalización coexiste con la protección del medio ambiente; no deteriora los salarios de la clase trabajadora; las compañías multinacionales son el motor de la integración económica y existe una correlación entre globalización, transparencia y libertad política y civil.
En esos aspectos, dijo, las naciones con mejor desempeño en cada uno de esos puntos son, precisamente, más globalizadas. En ese sentido expuso que a pesar de los acontecimientos del 11 septiembre de 2001 en Estados Unidos disminuyó el ritmo de globalización, pero los países continúan integrándose.
"El nivel de integración aumentó a pesar del 11 de septiembre de 2001 y la caída en la actividad económica mundial, debido a que el incremento de la globalización social, política y tecnológica fue superior a la caída de la integración económica", puntualizó.