Pide negociación pacífica

CEESP: el problema del campo se debe resolver sin presiones

DAVID ZUÑIGA

El diálogo entre gobierno y productores para buscar alternativas ante la apertura del sector agropecuario ofrece la posibilidad de diseñar una política "óptima" con la participación de todos los sectores y así eliminar "errores y sesgos" del pasado, señaló el Centro de Estudio Económicos del Sector Privado (CEESP). Sin embargo, también demandó al gobierno federal dejar de dar "privilegios" a quienes violentan el estado de derecho.

El organismo elogió la disposición de las partes involucradas para buscar alternativas ante la apertura agropecuaria prevista en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y tratar de lograr un desarrollo más rápido y equilibrado del sector. No obstante, insistió en que se debe privilegiar la negociación pacífica "sin presiones de ningún tipo, a fin de reconstruir el mermado estado de derecho".

Por su parte, Gerardo Mancilla, analista de Consultores Internacionales, consideró que el apoyo para el campo no debe basarse en programas generalizados, sino que debe tomar en cuenta las características y problemas de cada región y sector productivo, pues no todos han resultado igualmente perjudicados por la apertura comercial. Asimismo consideró que debe analizarse la reconversión de cultivos, sobre todo de aquellos en los que México tiene menos oportunidades de ser competitivo.

La Secretaría de Economía ha asegurado que este año se reforzará el apoyo económico y jurídico al sector agropecuario mexicano para hacer frente a la apertura casi total del sector prevista en el TLCAN.

Sin embargo, este apoyo llega cuando se ha abierto 98 por ciento del sector y las importaciones de productos agropecuarios procedentes de Estados Unidos ascendieron en 2001 a más de 8 mil 500 millones de dólares.

La dependencia argumentó que México puede aplicar programas internos para apoyar a sus productores, de conformidad con las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC), las cuales también prevén la aplicación de cuotas compensatorias a productos subsidiados por Canadá o Estados Unidos.

A partir de este año entrarán libres de arancel 98 por ciento de los productos agropecuarios negociados en el TLCAN. Para 2008 la apertura será total, pues ya sólo falta por desgravar 18 fracciones arancelarias.

El año pasado México importó de Estados Unidos 4 mil 420 millones de dólares en productos libres de arancel, correspondientes a 599 fracciones arancelarias o 55 por ciento de todas las negociadas en el TLCAN. Este año se liberarán 475 fracciones más, equivalentes a 43 por ciento de los productos del sector. De este grupo de productos, México importó de Estados Unidos 3 mil 335 millones de dólares en 2001.

El reporte de la Secretaría de Economía explica que 29 productos o fracciones quedarán libres del arancel, y 15 productos, de la salvaguarda especial. La secretaría también defiende el TLCAN, al señalar que ha promovido la captación de inversión extranjera directa, la cual ha "aumentado la competitividad" del campo mexicano y ofrece "grandes oportunidades" a los sectores manufacturero y agropecuario.