Considera el Ejecutivo local una burla el incremento de 4.5 por ciento a mínimos
Propone el GDF a trabajadores integrar prestaciones a salarios
La medida no implica un aumento en el presupuesto, sólo reorientar el gasto, señala
Se les ha dado un uso de control corporativo que obliga a los sindicalizados a alinearse, dice
ELIA BALTAZAR
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que para el tercer año de su gobierno el salario de los trabajadores de la administración capitalina habrá recuperado 6 puntos porcentuales, mediante la política de otorgar un incremento de 2 por ciento por encima de la inflación.
Informó que en las negociaciones que sostienen las autoridades con el Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF), para reformar las condiciones generales de trabajo, se ha propuesto aplicar directo al salario el monto de las prestaciones que actualmente otorga su administración, como la entrega de despensa o uniformes, pues éstas significan aproximadamente 50 por ciento del salario.
El propósito, explicó, es mejorar las condiciones de los trabajadores de base, sobre todo de quienes menos ingresos perciben, y evitar el manejo político de los beneficios laborales, pues este tipo de prestaciones, consideró, ha sido un mecanismo de control corporativo que obligaba a los sindicalizados a "alinearse" con sus jefes y líderes sindicales.
Dijo: "Las prestaciones no tienen por qué administrarse ni entregarse por medio de las autoridades o los líderes sindicales. Ese monto, dijo, mejor debe trasladarse al salario, que así obtendría un importante incremento si se logra lo que proponemos".
Advirtió, además, que esta medida no significaría un aumento en el presupuesto destinado a los salarios de los trabajadores, pues se trata sólo de reorientar el gasto.
Respecto de la política salarial de su gobierno, López Obrador aseguró que el principal argumento para sostener un aumento salarial de 2 por ciento por encima de la inflación en favor de los trabajadores capitalinos no necesita más justificación que la pérdida de 75 por ciento en el poder adquisitivo del salario mínimo durante los 20 años de neoliberalismo en el país.
Es mucho el rezago en materia salarial, dijo, y por eso consideró "una burla" el aumento de 4.5 por ciento a los salarios mínimos, cuando la inflación proyectada para este año se calcula entre 5 y 5.5 por ciento.
En sentido contrario, la administración capitalina ha otorgado, durante tres años consecutivos, un aumento de dos puntos porcentuales por encima del índice inflacionario, "para recuperar terreno de manera gradual". Así, a la fecha, el salario de los trabajadores ha recuperado al menos 6 puntos porcentuales, aseguró.
En su conferencia de prensa matutina, el jefe de Gobierno del DF anunció también que el próximo 6 de enero dará a conocer las líneas generales y las prioridades de su administración para este año.
Por lo pronto indicó: "Vemos este año con optimismo y seguiremos trabajando para crear fuentes de trabajo, para otorgar créditos para el autoempleo, para apoyar a la gente humilde y a los empresarios, con la idea de que se mantenga la inversión en la ciudad".
Adelantó que habrá un nuevo planteamiento en materia de seguridad y se fijarán metas para este año.
López Obrador señaló que su gobierno se ha propuesto, entre otros objetivos, lograr dos cambios fundamentales en la sociedad capitalina: el fortalecimiento de la institución familiar, para evitar su desintegración, y el cambio en el perfil de los servidores públicos, para que éstos dejen atrás actitudes "fantoches", desplantes de prepotencia y derroche de recursos públicos.
Aseguró que el gobierno que encabeza no mantiene "intereses que lo vinculen con mafias" y nadie más que la gente tiene influencia sobre las autoridades.
También anunció que hará observaciones a la Ley de Información aprobada por la Asamblea Legislativa, en el punto específico de la creación de un consejo para la transparencia.