No al desalojo de comunidades en Montes Azules
Señora directora: En diciembre de 1997 se
cometió uno de los mayores crímenes de la historia moderna
de México. Nunca olvidaremos lo ocurrido en Acteal y la responsabilidad
de Estado en esta matanza. Tampoco dejaremos de estar al lado de las comunidades
chiapanecas que todos los días pelean por defender su derecho a
una vida digna.
Hoy, como los diciembres anteriores, una nueva amenaza
pende sobre las pequeñas comunidades que habitan la reserva de Montes
Azules, lugar de enormes y codiciadas riquezas. Argumentando protección
ecológica se busca entregar esas reservas a la explotación
turística, que evidentemente produce un daño mayor que el
de las comunidades que cohabitan con la naturaleza y la desarrollan. La
entrada de sospechosas caravanas de jeeps con banderas israelíes
y estadunidenses, aparentemente sin control, no ha sido, en cambio, preocupación
de la Semarnat, que sostiene la decisión de realizar los desalojos.
Cualquier intento por desalojar a las comunidades de Montes
Azules constituirá una escalada del conflicto en Chiapas y será
asumido como un relanzamiento de hostilidades en contra del Ejército
Zapatista de Liberación Nacional. No queremos otro Acteal.
Responsabilizamos al gobierno mexicano de cualquier agresión
o daño que sufran las comunidades de Montes Azules. Todos estaremos
con los ojos puestos en Chiapas. Llamamos a la sociedad civil a movilizarse
para frenar este nuevo atentado en contra de los que luchan por impedir
la pulverización y venta del territorio nacional.
Comité Universitario de Lucha contra el ALCA,
Ana Esther Ceceña
Niegan haber cometido acciones violentas en Chiapas
Señora directora: El día 15 del mes
presente se publicó una nota sobre el desalojo de los pobladores
de Montes Azules, Chiapas. Nosotros condenamos esas intenciones del gobierno
de Pablo Salazar, quien fiel a su vocación represiva, insiste en
la violencia para resolver los añejos problemas en el estado de
Chiapas.
Nos preocupa un párrafo del artículo que
señala que el Mocri-CNPA desalojó violentamente a las familias
que ahora ocupan el asentamiento denominado Arroyo San Pablo, del poblado
Río Salinas. En este sentido queremos aclarar que somos una organización
con trayectoria política y democrática, que hemos participado
en las distintas luchas por democratizar el estado de Chiapas.
De ninguna manera tenemos la política de desalojar
a ningún indígena y campesino de sus tierras, no somos responsables
de los conflictos intercomunitarios, y no es nuestra política crear
conflictos entre comunidades. Agradeceríamos al señor Hermann
Bellinghausen que concrete más el asunto, sin que se nos acuse,
como organización, de algo de que no somos responsables.
De ninguna manera somos partidarios, y mucho menos impulsores,
de acciones como las que nos atribuyen; contrariamente a ello, impulsamos
la existencia de distintas formas de pensar en un marco de respeto político
hacia la militancia de otras organizaciones o partidos políticos.
Por otro lado, estamos convencidos de que la violencia
no será la solución a los problemas de tierra de miles y
miles de indígenas-campesinos, que tienen su última esperanza
de sobrevivencia en estas tierras.
Aprovechamos el momento para condenar la postura represiva
que hoy se asume sobre nuestros compañeros indígenas que
se encuentran asentados en los Montes Azules. Queremos al mismo tiempo
recordar que nosotros hemos sido víctimas de esta política
represiva del actual gobierno y que fuimos golpeados en el violento operativo
de San José en Marqués de Comillas el 27 de julio de
2001.
Atentamente
Movimiento Campesino Regional Independiente. Responsable:
Pavel Vázquez Cruz
Lucro desmedido en la venta de bancos
Señora directora: Le adjunto un comentario
que, si lo juzga conveniente, le agradecería incluirlo en El Correo
Ilustrado.
¿Los ciudadanos mexicanos habremos perdido nuestra
capacidad de protestar?
Es indignante enterarnos de que el banco español
Santander vendió en mil 645 millones de dólares 24.9 por
ciento de las acciones del banco Serfin, que había adquirido de
México hace dos años en mil 560 millones de dólares;
aunque le hubiese inyectado una cantidad igual al precio de compra, es
impensable que en ese breve periodo hubiera tenido una utilidad de 100
por ciento. Lo menos que puede uno pensar es que hubo una gran torpeza
por parte de los negociadores mexicanos, o es otro de los gravísimos
casos de corrupción que están acabando con la economía
de nuestro país. Si hubiera una explicación, que se dé
de inmediato, y si no, que investigue e informe públicamente la
Secretaría de la Contraloría, pues no es justo que se dilapide
el patrimonio nacional cuando el núcleo de ciudadanos en un 65 por
ciento vive en la pobreza.
Fernando Canales Lozano
Llaman a oposición activa al golpismo en Venezuela
Señora directora: Lo que sucede en Venezuela
tiene una extrema gravedad. Sectores de derecha, empresariales, de medios
de comunicación y de antiguos partidos ligados a casos de corrupción
ejecutan acciones golpistas, desestabilizadoras, violentas e inconstitucionales
en contra del gobierno presidido por Hugo Chávez.
A eso se suma la decisión del gobierno de Estados
Unidos de interferir en la situación interna venezolana, y tácitamente
exigir la salida del gobierno elegido democrática y mayoritariamente.
Se repiten las tesis golpistas aplicadas en Chile contra
Salvador Allende y desestabilizadoras aplicadas contra el gobierno sandinista
en Nicaragua. Los acontecimientos recientes indican que hay prisa de la
derecha, el empresariado y la Casa Blanca por derrocar a Hugo Chávez,
antes de que Luiz Inacio Lula Da Silva asuma la presidencia de Brasil,
y así evitar una correlación de fuerzas favorable a las corrientes
progresistas en la región.
Se podrá diferir de políticas del gobierno
de Venezuela, pero transformar eso en intentonas golpistas o en pasividad
ante los planes de desestabilización es algo distinto. Es imprescindible
que se respete la Constitución nacional en Venezuela, que se respete
su soberanía y la legalidad institucional. En esa nación
bolivariana se juega hoy mucho de la dignidad y del futuro de los proyectos
progresistas y populares en Latinoamérica. Por ello, consideramos
que partidos políticos, medios de prensa, organizaciones sociales,
académicos y la comunidad latinoamericana deben oponerse al golpismo
en Venezuela.
Son momentos decisivos para el pueblo venezolano y es
hora de estar junto a ellos.
Atentamente
Jorge Turner, Mario Saucedo, Guillermo Teillier, Gilberto
López y Rivas, Guy Duval, Hugo Guzmán, Carlos Fazio, Nayar
López, Blanche Petrich, Darío Salinas, Alicia Castellanos,
José Steinsleger, Alfredo Jiménez, Ivón Saa, Rocío
Mejía
N. de la R.
Por un error, la nota principal de la página 10
de la edición correspondiente al martes 17 de diciembre, relativa
a la especulación turística en la reserva de la biosfera
de Montes Azules, se publicó con el crédito del reportero
José Antonio Román, cuando en realidad su autor es Hermann
Bellinghausen, enviado de La Jornada a la zona de conflicto.