Ponte, poeta disidente
"Me quedo en Cuba"
BLANCHE PETRICH ENVIADA
Guadalajara. Antonio José Ponte es un poeta disidente que vive en La Habana y forma parte de la Unión Nacional de Escritores y Autores de Cuba (UNEAC). Su obra no está incluida en ninguna de las tres antologías de literatura cubana que la delegación oficial presenta en la Feria Internacional del Libro 2002. Es miembro del consejo de redacción de la revista opositora Encuentro, que se publica en España. Está aquí, invitado por la Feria Internacional del Libro por conducto de Artes de México. Ha participado en dos mesas redondas y una presentación.
Declara: "La UNEAC no es la misma organización" que en tiempos de Guillermo Cabrera Infante "purgaba" y vetaba autores de manera arbitraria, o que inclusive, en los años 60 llegaba a extremos como el caso de Heberto Padilla, encarcelado y obligado publicar una declaración autoinculpatoria, acusando además a sus propios amigos.
"No es la misma, trata de no serlo pero tiene estatutos con los cuales se puede reproducir todo lo que ocurrió entonces. La diferencia es que hoy se deben a la opinión pública como antes no se debían y eso les hace no utilizar esas armas que antes empleaban para acabar con un escritor. En mi caso pudo haber sido amabilidad de algunos escritores, pero también temor a lo que hubiera podido ocurrir de utilizar la maquinaria de guerra que ellos tienen contra mí."
Señala que ha sufrido presiones para salir de la UNEAC, "pero no quiero". De igual modo permanece arraigado en su país. "No quiero ir a ningún lado. Me quedo en Cuba."
Mitoponte, le dicen sus amigos en el exterior. "Conflictivo", lo califican funcionarios del gobierno. Ediciones Vigía, que fabrica libros artesanales con papel de fibra, le ha publicado Un seguidor de Montaigne mira La Habana. Escribió el ensayo Las comidas profundas, el hambre en La Habana.
Sobre su trabajo en la revista Encuentro, señala que ésta tiene importante significado para quienes dentro del país la conocen y la leen. Circula clandestina y de mano en mano. Puntualiza: "Ninguna otra revista o libro cubano apuesta tan fuerte por un cambio político como ésta y ninguna, Encuentro tampoco, conseguirá para nosotros ese cambio político".