Ni EU ni Gran Bretaña han presentado
pruebas sobre el arsenal iraquí: Blix
Entrega Irak a la ONU informe sobre armamento; son
casi 12 mil páginas
Escepticismo en la Casa Blanca; dice que analizará
la credibilidad de la declaración
AFP Y REUTERS
Estocolmo, 7 de diciembre. El director de la Comisión
de Control de Verificación y de Inspeccción (Unmovic) de
la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Hans Blix, señaló
este sábado que aún no ha visto ninguna evidencia convincente
presentada por Estados Unidos sobre la existencia de armas de destrucción
masiva en Irak.
Al tiempo que el régimen de Saddam Hussein entregó
este sábado a los expertos del organismo mundial en Bagdad su declaración
sobre armamento, y Estados Unidos indicó que estudiará minuciosamente
el informe, aunque prometió continuar su campaña para terminar
con la "acumulación de armas de destrucción masiva" en Irak.
"No estamos diciendo que (Irak) aún tiene armas
de destrucción prohibida. Pero los británicos y los estadunidenses
sí -ellos dicen que tienen informes secretos que lo demuestran-.
Sin embargo, a nosotros no nos han dado esos informes", declaró
Blix a la radio sueca en entrevista. "Sólo tenemos preguntas", añadió.
"Ellos han hablado de tubos de aluminio que pueden ser
utilizados como centrífugas para enriquecer el uranio, mientras
otros piensan que pueden ser utilizados para otros propósitos",
afirmó Blix, quien aseguró que si se demuestra que Bagdad
ha mentido y efectivamente produce armas de destrucción masiva,
Irak "estaría verdaderamente en apuros".
A su vez, funcionarios de Estados Unidos dijeron que no
revelarán la información que tienen sobre la existencia de
programas iraquíes de armamento, para no traicionar sus fuentes.
El jefe de los inspectores de desarme, además,
desmintió que las autoridades estadunidenses estén presionando
a los expertos de la misión de la ONU para que saquen clandestinamente
del país árabe a científicos iraquíes, proponiéndoles
asilo político a cambio de información.
EU ofrece protección a científicos
Blix
aseguró que la consejera de Seguridad Nacional estadunidense, Condoleezza
Rice, con quien se entrevistó a comienzos de la semana, no le pidió
que hiciera eso. "No, ella no pidió nada", declaró Blix.
Pero ayer la Casa Blanca propuso, como medio para saber la verdad sobre
Irak, el preguntar sobre información confidencial a científicos
iraquíes y ofrecerles refugio en Estados Unidos para protegerlos
de las represalias de Bagdad.
Por lo pronto, Irak entregó a los expertos su declaración
sobre armamento, confirmó el vocero de la ONU, Hiro Ueki. Los funcionarios
iraquíes ingresaron al cuartel general de la ONU en el Hotel Canal,
en Bagdad, para entregar el documento de cerca de 12 mil páginas
y se retiraron poco después.
"La declaración reafirma que Irak ya no tiene armas
de destrucción masiva", declaró el general iraquí
Hossam Mohamed Amin, jefe del organismo nacional de control, equivalente
de los inspectores de la ONU. El contenido de esta "declaración
inicial", de 11 mil 807 páginas y varios CD-roms de informes sobre
armas y programas militares iraquíes, no fue divulgado a la prensa.
Sin embargo, antes de ser entregada a los inspectores
de la ONU, la declaración fue mostrada a la prensa, en donde se
observaron los documentos y discos compactos, que estaban resguardados
en el cuartel general del Directorio Nacional Iraquí de Revisión.
Los documentos estaban contenidos en alrededor de 12 expedientes.
La declaración iraquí, redactada en inglés
y árabe, deberá ser traducida en Nueva York a las tres lenguas
restantes (francés, ruso y chino) de los cinco miembros permanentes
del Consejo de Seguridad. El presidente en funciones del consejo, el colombiano
Alfonso Valdivieso, subrayó que el documento no se hará público
antes de que los expertos verifiquen su contenido. La declaración
será enviada a la sede de ONU en Nueva York y a la Agencia Internacional
de la Energía Atómica (AIEA) en Viena.
"Esto puede llevar un poco de tiempo", comentó
Blix, y subrayó que ningún país miembro del Consejo
de Seguridad debe tener acceso a la declaración antes que los demás,
afirmó.
Esta primera lectura podría llevar más de
una semana, señalaron fuentes de la ONU en Bagdad, y el procedimiento
de verificación de las declaraciones iraquíes será
aún mucho más largo.
En efecto, una declaración que se constatara como
falsa en el documento proporcionado por Irak -o una omisión- podría
constituir una "violación flagrante" de la resolución 1441
y abrir la puerta a una operación militar.
El gobierno de Estados Unidos, por medio de un comunicado,
indicó que estudiará la declaración iraquí
y prometió continuar su campaña para terminar con la "acumulación
de armas de destrucción masiva" de Hussein. "El gobierno estadunidense
analizará esta declaración respecto de su credibilidad y
cumplimiento con la resolución 1441", indicó un comunicado.
"Continuaremos trabajando con otros países para
lograr el último objetivo de proteger la paz, terminando con la
búsqueda y acumulación de armas de destrucción masiva
de Saddam Hussein", agregó el documento.
El presidente estadunidense, George W. Bush, durante su
tradicional programa radial sabatino, señaló que "sólo
vamos a juzgar la honestidad y la exactitud de la declaración luego
de haberla examinado cuidadosamente, y eso va a llevar tiempo. Desarmar
ese régimen es un aspecto fundamental de la guerra contra el terrorismo",
agregó.
En este contexto, los expertos de armas de la ONU reiniciaron
sus inspecciones en Irak tras una pausa de dos días, debido a la
festividad musulmana que marca el fin del mes de ayuno del Ramadán.
Los expertos confirmaron que Irak ha cooperado con los registros en 20
sitios. Un equipo de inspectores de la Unmovic examinó instalaciones
que albergan la Compañía General Al-Quds, en el pueblo Al-Iskandariyah,
40 kilómetros al sur de Bagdad.
Esta compañía es parte de la Comisión
de Industrialización del ejército. Las autoridades iraquíes
afirman que ésta se concentra fundamentalmente en investigaciones
y fue establecida después que los inspectores salieron de Bagdad
en 1998. Mientras, los expertos de la AIEA, visitaron la instalación
nuclear Al-Tuweitha, 20 kilómetros al sur de Bagdad.