Feria secuestrada
Señora directora: Cuando hace un año
exactamente las autoridades de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara
(FIL) me comentaron que el próximo país invitado sería
Cuba, señalé lo obvio: desde los años sesenta, y muy
claramente a partir del caso Padilla, en ese país no existe libertad
cultural (ni ninguna otra libertad), por lo cual había que evitar
la entrega de la feria al único y último régimen
totalitario de nuestra América. La alternativa era organizarla con
plena autonomía mexicana, invitando en términos de igualdad
a los escritores orgánicos de Castro y a escritores disidentes.
No se hizo y los resultados están a la vista.
En el mejor estilo de los tribunales estalinistas y con
la indulgencia (espero que no la complicidad) de las autoridades de la
FIL, un puñado de jóvenes furibundos y funcionarios cubanos
(incluido un representante de Prensa Latina) entablaron un juicio intelectual
sumario a los colaboradores Letras Libres, no sólo impidiéndoles
el derecho de réplica, sino cubriéndolos de insultos y secuestrándolos
de hecho, físicamente, en el local de la FIL donde había
tenido lugar la presentación del número de noviembre de la
revista, dedicado a los "futuros de Cuba". Según la crónica
insospechable de Blanche Petrich en La Jornada, se trató
de "una acción concertada", de una "emboscada" como desde antes
de la sesión "se rumoraba".
Los inquisidores se refirieron a la revista como "Letras
muertas". Bonita proyección: para ellos el antónimo de la
libertad es la muerte. Pero en México, España y América
Latina, Letras Libres está muy viva. No circula, al menos
públicamente, en Cuba (donde la letra, en efecto, muere o mata)
pero circulará, no hay duda, el día en que la isla recobre
su libertad.
Enrique Krauze
Niega defensa de Cabal haber dado información
Señora directora: Por medio de la presente
me dirijo a usted en mi carácter de defensor del señor Carlos
Efraín de Jesús Cabal Peniche, cargo que me ha sido conferido
por éste y que desempeño ante diversas autoridades jurisdiccionales,
entre las que se encuentra el juzgado segundo de distrito de procesos penales
federales en el Distrito Federal.
Con fecha 30 de noviembre del año en curso, apareció
publicado en el periódico que usted dirige (página 14) un
artículo, suscrito por el señor Gustavo Castillo García,
que contiene diversa información relativa al proceso 176/2001 que
se sigue ante el juzgado segundo de distrito de procesos penales federales
en el Distrito Federal, y cuya fuente de información, según
se sugiere en el texto del artículo, fue la defensa del señor
Cabal Peniche.
Al respecto, le informo que ningún miembro de la
defensa del señor Carlos Efraín de Jesús Cabal Peniche
le proporcionó al señor Gustavo Castillo García información
alguna relativa a las garantías propuestas por el señor Cabal
Peniche para garantizar su libertad provisional en el proceso penal antes
mencionado, por lo que cualquier inferencia en este sentido contenida en
dicho artículo es falsa de toda falsedad.
Le agradezco de antemano la publicación que haga
de la presente carta en el periódico que usted dirige, solicitándole,
por supuesto, le dé previa vista de la misma al articulista para
que haga las aclaraciones o precisiones pertinentes.
No omito manifestarle que esta defensa no tiene inconveniente
alguno para que revele la supuesta fuente de tal información, misma
que no validamos por respeto y cumplimiento a nuestras obligaciones legales,
derivadas de lo mandatado por el juez segundo de distrito de procesos penales
federales a este respecto.
Sin otro particular, quedo a sus órdenes para cualquier
aclaración respecto a la presente.
Julio Esponda Ugartechea
Aclara Sarukhán declaraciones sobre transgénicos
Señora directora: En su edición del
viernes 29 de noviembre hay un reportaje, en la sección Sociedad
y Justicia, sobre la conferencia que dicté en un seminario sobre
alimentos transgénicos, organizado por el Centro de Investigaciones
Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades, así como una breve
entrevista con reporteros de varios diarios, entre los cuales se encontraba
la reportera de La Jornada, autora de la nota de referencia.
El artículo y los titulares que lo preceden proyectan
una imagen distorsionada tanto de lo que mencioné en la breve entrevista,
como particularmente de lo que expresé en mi conferencia. La importancia
del tema, y mi posición académica respecto al mismo, me impelen
a hacer varias aclaraciones al respecto. A esto se une el hecho de que,
a iniciativa de la Comisión de Cooperación Ambiental del
TLCAN, presido una comisión independiente, compuesta por 15 representantes
de México, Canadá y Estados Unidos, en las diferentes áreas
involucradas sobre el tema de introgesión de transgenes en razas
criollas de maíz, que hará recomendaciones al respecto a
los tres países miembros del tratado. Los 15 miembros de la comisión
hemos asumido el compromiso de tratar este importante y delicado asunto
con la mayor objetividad, basados en datos científicos comprobados,
pero además con plena conciencia de las implicaciones culturales,
económicas y sociales que el caso tiene. Por lo anterior, le solicito
atentamente publique de manera equivalente en espacio y visibilidad las
siguientes aclaraciones a la nota escrita por la reportera Angélica
Enciso.
1. En la entrevista y en la conferencia hice especial
énfasis en la necesidad de evitar los extremos que han generado
polémica sobre el tema, cargándola de argumentos no documentados.
Estos argumentos provienen, de un lado, del interés de algunas industrias
biotecnológicas en su afán por comercializar sus productos,
presentándolos como la única solución al gigantesco
reto de producir el doble de alimentos de lo que el mundo produce ahora
para los 9 mil millones de habitantes que habrá en el planeta a
mediados del siglo. De otro lado, de la satanización de la biotecnología
en general y los transgénicos en particular, presentándolos,
en especulaciones sin bases documentadas, como implícita e irrevocablemente
dañinos. Ninguno de los dos extremos nos resulta útil para
discernir inteligentemente cómo beneficiar a nuestra sociedad de
esta nueva tecnología, sin daños a la salud, al ambiente
o a la economía de los agricultures, sean éstos tecnificados
o tradicionales, y a las culturas de nuestro país. Esta posición,
explícita en mi conferencia, no se presenta en la nota.
2. Nunca mencioné, como indica un encabezado de
la nota, "que la propagación de esa técnica (la ingeniería
genética en plantas) ocasionaría más dependencia de
las transnacionales". Presenté la posición justamente opuesta,
insistiendo en que México tiene la capacidad científica y
técnica para generar nuestros propios cultivos transgénicos
(cosa que ya ocurre por cierto), o incluso si fuese el caso, de escoger
inteligentemente cuáles productos transgénicos nos convienen.
Remarqué que lo anterior se debería hacer de manera que los
productos fuesen relevantes y pertinentes para las necesidades y características
ecológicas, económicas y culturales de nuestra agricultura.
Agradezco su gentil atención a estas aclaraciones.
Atentamente
Dr. José Sarukhán, investigador
Un frío no hace invierno
Señora directora: Con este título
me refiero a que el servicio deficiente recibido por parte de un burócrata
de la Condusef en agosto pasado (puntualmente denunciado en este noble
espacio) no obstó para que ahora tenga una opinión diferente
de esta comisión, al resolver a mi favor uno de los frecuentes casos
denunciados por doquier, en los que los cajeros automáticos del
sistema bancario mexicano no otorgan el dinero solicitado por el cuentahabiente
pero sí hacen el riguroso descuento en sus registros, como si el
dinero hubiera sido efectivamente entregado. Casos que, de resolverse,
llevan meses de "jineteo" inmoral por parte de los bancos sobre los recursos
de los particulares.
Pues bien, la Comisión Nacional para la Defensa
y Protección de los Usuarios de Servicios Financieros, por mediación
personal de Alfredo Nolasco, director general de la unidad de comunicación
social, consiguió que en tan sólo nueve días me fueran
reintegrados los 3 mil pesos que un cajero de Banco Santander nunca me
proporcionó, pero que sí descontó de mi cuenta en
Banamex.
Así pues, mi reconocimiento al organismo y a don
Alfredo en particular. Esperamos que esta golondrina sí haga verano.
Raúl Gutiérrez y Montero
Invitación
Al miércoles de debate en la delegación
Tlalpan
Señora directora: Este miércoles
4 de diciembre se llevará a cabo una sesión más del
decimotercer ciclo de conferencias: Miércoles de Debate: Culturas
de Paz. Seguridad y Democracia en América Latina, por lo que invitamos
al público en general a discutir el tema.
Culturas de paz es el título del libro que
los editores Mario Salinas y Ursula Oswald Spring presentan dentro de este
acto. Para ello se contará con la presencia de reconocidos investigadores
y escritores que comentarán la obra, como Carlos Monsiváis,
Clara Jusidman, Juan Ramón de la Fuente, Ursula Oswald y un servidor.
La cita es en el auditorio Javier Barros Sierra Casa Frissac,
ubicado en Plaza de la Constitución esquina calle Moneda, en la
colonia Centro de Tlalpan, a partir de las seis de la tarde. Se entregará
constancia a los asistentes.
Gilberto López y Rivas, jefe delegacional en Tlalpan