Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Miércoles 27 de noviembre de 2002
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Política

Los subsidios estadunidenses a ese sector, la causa, expone el Presidente en la binacional

Preocupante, la liberalización del mercado agrícola en el TLC: Fox

Podría traer consecuencias adversas para la economía mexicana, advierte el mandatario Bush insiste en que para EU ''no hay otra relación más importante'' que con México

JUAN MANUEL VENEGAS

El presidente Vicente Fox Quesada aceptó que en su gobierno ''hay preocupación'' por la inminente liberalización del mercado agrícola en los países del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), sobre todo por los subsidios estadunidenses a ese sector.

En las condiciones actuales ''la apertura de este mercado podría traer consecuencias adversas para un importante sector de la economía mexicana'', advirtió el mandatario ante funcionarios de México y Estados Unidos, en un mensaje que, vía satélite, escuchó el presidente George W. Bush, en la inauguración de la 19 reunión de la Comisión Binacional, que se llevó a cabo en la ciudad de México.

De parte de Bush no hubo una respuesta directa al planteamiento de Fox de impulsar una cooperación agropecuaria ''que no afecte los niveles de ingreso en el campo mexicano y en las comunidades rurales, mantenga su viabilidad económica y contribuya a reducir la presión migratoria hacia el norte''.

Amistad refrendada

A lo largo de su mensaje -también transmitido por televisión- el mandatario estadunidense habló en general de la ''buena relación'' con México, insistió en que para su país ''no hay otra más importante'' en el mundo y refrendó su ''amistad'' con Vicente Fox.

Incluso, entre los temas que mencionó de su interés en los trabajos de la Comisión Binacional omitió el caso de la apertura agrícola. ''En la reunión de hoy estamos finalizando acuerdos sobre cooperación fronteriza, educación, vivienda, desarrollo económico y el combate al trabajo infantil (y) también hemos acordado una innovadora iniciativa de calidad del aire en la frontera para ayudar a gobiernos locales en ambos países a trabajar conjuntamente para reducir la contaminación''.

Sobre el tema migratorio, Bush apuntó que ''la guerra contra el terror'' ha dificultado los flujos a través de la frontera con su país, por lo que pidió a su homólogo mexicano ''paciencia'' para retomar las conversaciones sobre un posible acuerdo en la materia.

Arreglos satisfactorios

En la sala de juntas del despacho presidencial de Los Pinos, donde recibió al secretario de Estado, Colin Powell; al procurador general de Estados Unidos, John Ashcroft, y al embajador de ese país en México, Tony Garza, así como a varios integrantes de su gabinete, el presidente Vicente Fox indicó que sólo el ''esfuerzo conjunto'' permitirá enfrentar los desafíos que, de manera natural, surgen de una relación tan compleja e intensa, al compartir la frontera con mayor movimiento de bienes y personas en todo el mundo.

Consideró que el intercambio comercial es uno de los rubros ''de mayor éxito'' en esa relación que, al ser tan dinámica, provoca controversias ''que deberán ser resueltas conforme a las normas de la Organización Mundial de Comercio (OMC), del TLCAN y mediante negociaciones bilaterales que permitan alcanzar un arreglo mutuamente satisfactorio".

Así dio entrada al tema que ''más preocupa'' actualmente al gobierno mexicano: la liberalización del mercado agrícola en su última etapa en el acuerdo comercial, ''en especial a la luz de los subsidios estadunidenses'' a ese sector.

Norteamérica, ''región próspera y justa''

''Debemos impulsar la cooperación agropecuaria para no afectar los niveles de ingreso en el campo mexicano... lejos de dividirnos, nuestras economías nos acercan, de la misma manera que nos acerca la búsqueda de soluciones a los problemas comunes'', planteó Fox, toda vez que -según dijo- cuando se firmó el TLCAN, hace casi diez años, ''Canadá, Estados Unidos y México decidimos hacer de Norteamérica una región próspera y justa, y decidimos también hacer de nuestra región una zona de más y mejores oportunidades para todos sus habitantes''.

Luego pasó al tema del narcotráfico -que por primera vez en muchos años no ocupa, al menos públicamente, la atención prioritaria de la Comisión Binacional-, congratulándose por la suspensión del proceso de certificación estadunidense, como una señal de confianza.

Tema toral

Y llegó al otro asunto de la agenda que sí es prioridad para su administración: la posibilidad de un acuerdo migratorio con Estados Unidos, para lo cual el presidente Vicente Fox pidió ''retomar las negociaciones para alcanzar acuerdos reales e integrales'', que permitan a las dos naciones ''enfrentar exitosamente los retos compartidos de la seguridad, el orden y la legalidad de la migración en el corto, mediano y largo plazos''.

En Guanajuato -recordó el titular del Ejecutivo su primera entrevista con Bush-, en febrero de 2001, ''alcanzamos un avance conceptual extraordinario en este tema, aunque los trágicos acontecimientos del 11 de septiembre obligaron a dar prioridad a los temas de seguridad y postergar la solución de otros importantes asuntos de la agenda bilateral. Sin embargo resulta indispensable retomar el espíritu de Guanajuato y avanzar en el establecimiento de un marco normativo que regule y dé orden al fenómeno migratorio entre ambos países''.

Tengan paciencia...

En su mensaje, y sobre el tema migratorio, George W. Bush explicó que la ''guerra contra el terror'' ha hecho más difíciles los flujos a través de nuestra frontera, por lo que ''pedimos paciencia mientras trabajamos para poner fin a las demoras''.

Añadió que el acuerdo de fronteras inteligentes, alcanzado en el marco de la sociedad para la prosperidad que ambos mandatarios firmaron el mes de marzo pasado en la cumbre de Monterrey, ayudará mucho para seguir en el tema, ''pues estamos utilizando tecnología avanzada para asegurar que nuestras fronteras estén abiertas a todo comercio y viaje honrado, pero cerradas a los criminales, a los narcotraficantes y a los terroristas''.

Según dijo el mandatario, las políticas migratorias de Estados Unidos ''deben tratar a los hombres, mujeres y niños mexicanos con respeto y dignidad'', en tanto que los miembros de los gabinetes (de los dos países) ''continúan trabajando para generar políticas nuevas y creativas para que la migración sea legal, ordenada y segura''.

Finalmente, sobre la ''guerra contra el terror'', dijo que ve en México a ''un aliado apreciado'', pues el presidente Fox ''ha aumentado la seguridad en la frontera y trabajado en la Organización de Naciones Unidas (ONU) para aprobar resoluciones firmes contra el terrorismo y comprende que los terroristas odian nuestra libertad, amenazan nuestro modo de vida y deben ser derrotados''.

Puntualizó al respecto: ''El presidente Fox y yo trabajamos estrechamente en el Consejo de Seguridad para exigir a Saddam Hussein que cumpla sus promesas de desarme, para hacer respetar la autoridad de las Naciones Unidas y, sobre todo, para mantener la paz''.

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