Déficit significativo en infraestructura
por cambios en el perfil epidemiológico, dice
Recomienda el BM a México privatizar servicios
sanitarios
La tasa de mortalidad por enfermedades infecciosas en
Oaxaca y Chiapas es hasta tres veces mayor al promedio nacional, señala
Si no hay reformas, la problemática aumentará
considerablemente, advierte
ANGELES CRUZ /I
La ineficacia de los servicios de salud en México
ocasiona anualmente una pérdida de 7.5 millones de años de
vida saludable, cifra que al final del sexenio se incrementará 30
por ciento, según un estudio del Banco Mundial. Por eso, afirma,
el sistema sanitario tiene que cambiar y, entre otras acciones, permitir
la participación de la iniciativa privada.
Un diagnóstico del organismo financiero mundial
señala que la desigualdad en el acceso a los servicios de salud
y la brecha entre el norte y sur del país, así como entre
las áreas urbanas y rurales, son algunas de las principales causas
de la problemática.
Entre otras alternativas, propone al gobierno de México
incrementar la participación de la iniciativa privada en el sistema
sanitario, primero en los servicios de limpieza, abasto y seguridad, y
en una fase posterior podría proporcionar atención médica.
Resalta que hasta ahora los sectores público y
privado han funcionado como sistemas paralelos, lo cual ha ocasionado duplicación
de esfuerzos, es decir, hay asignación ineficaz de recursos, afirma.
Los particulares sólo han recibido señales
confusas
En
su análisis, el organismo llama la atención sobre el hecho
de que los particulares "desearían desempeñar un papel más
importante" en el área, pero sólo "han recibido señales
confusas" por parte del gobierno, a pesar de que la capacidad de los servicios
de salud está mermada.
Afirma que debido al aumento poblacional y al cambio en
el perfil epidemiológico, "se ha creado un boquete significativo"
en la disponibilidad de infraestructura y tecnología del sector
público. Señala el caso de la insuficiencia en equipo de
proyección de imagen y medicina general en los estados del norte.
Incluso, menciona que en algunas zonas de la República sólo
es posible encontrar oferta de servicios médicos particulares.
Asegura que por la vía privada se incrementaría
la eficiencia y la satisfacción de los usuarios, además de
que habría mayor flexibilidad en el manejo de la demanda de atención.
Una tercer área donde los proveedores particulares
podrían colaborar con el gobierno es en la aplicación de
recursos a las instituciones de servicios especializados en salud que asuman
la responsabilidad de atender a una población determinada. Para
ello, es necesario que el gobierno aplique las medidas de regulación
correspondientes. El BM plantea que, en una primera etapa, estas instituciones
podrían ofrecer un paquete integral de medicina familiar, similar
al que actualmente proveen algunas de esas empresas.
Aclara que los hospitales permanecerían bajo la
responsabilidad del sector público, con excepción de un limitado
número de áreas, como la de nacimientos, cirugías
menores y odontología. Con el tiempo, el paquete básico podría
ampliarse hasta incluir algunos servicios hospitalarios. A decir del Banco
Mundial, esto incrementaría la competencia entre los nosocomios
públicos y privados.
Una cuarta opción para que los particulares se
incorporen a la prestación de cuidados médicos consiste en
establecer un modelo de concesión (subrogación), de tal suerte
que algunas actividades clínicas pudieran otorgarse a los pacientes
en instituciones privadas de alta calidad garantizada.
El diagnóstico, incluido en el libro Una agenda
comprehensiva de desarrollo para la nueva era, México, editado
por el BM en 2001, refiere, con base en cifras oficiales, algunos de los
indicadores que llevan a que cada año se pierdan alrededor de 7.5
millones de años de vida saludable en el país. Menciona que
la tasa de mortalidad por enfermedades infecciosas en Oaxaca y Chiapas
es de 2.5 a tres veces más alta que el promedio nacional, y el nivel
de decesos infantiles en los cinco estados más pobres es dos veces
superiror respecto a las cinco entidades más ricas.
Otro dato que da cuenta del "pobre desempeño" de
los servicios sanitarios en México es la mortalidad de adultos que
se registra en Oaxaca, la cual es comparable a la de India. Por el contrario,
el número de defunciones que se registra en Nuevo León se
equipara con las cifras reportadas en algunas naciones europeas.
Resalta que el peso de la enfermedad es mayor en las áreas
rurales en relación con las urbanas, y que los hijos de las mujeres
que viven en extrema pobreza tienen un riesgo 2.5 veces mayor de morir
antes del primer año de vida que los niños cuyas madres tienen
mejores posibilidades económicas.
La organización y el financiamiento de la salud
tendrán que resolver estos desafíos, así como crear
los incentivos para que grupos económicos y proveedores participen
en la restructuración del sistema, apunta el BM.
Al final del sexenio el IMSS atenderá a 60 millones
El diagnóstico detalla que al final de la actual
administración, el peso de la problemática del sistema nacional
de salud se habrá incrementado considerablemente, a menos de que
se realice una reforma que permita mejoras significativas. De entrada,
dice, el número de habitantes pasará de 100 millones a 107
millones, mientras que la población mayor de 65 años se incrementará
25 por ciento, y el Instituto Mexicano del Seguro Social atenderá
a alrededor de 60 millones de personas.
De continuar la tendencia actual, en 2006 el número
de años de vida saludable perdidos se incrementará 30 por
ciento. La propuesta del Banco Mundial establece que con el propósito
de superar la problemática del sistema sanitario, la reforma tendría
que incluir tres objetivos: lograr el acceso universal a los servicios
médicos, terminar con la fragmentación de las instituciones
e impulsar la participación de la iniciativa privada en el sector.