Condena de la comunidad internacional
El presidente estadunidense, George W. Bush, expresó su solidaridad a su homólogo ruso Vladimir Putin y le ofreció su ayuda en "todo lo que necesite" en relación con la toma de rehenes en un teatro de Moscú por rebeldes chechenos, que exigen el retiro de las tropas rusas de Chechenia.
La comunidad internacional y aliados de Rusia condenaron en forma unánime la acción del comando checheno, que calificaron de "terrorista". Reclamaron la liberación inmediata de todos los rehenes sanos y salvos, entre los que se encuentran algunos extranjeros.
Bush "expresó sus pensamientos y plegarias y su solidaridad con el pueblo ruso" y calificó de terrorismo lo ocurrido, dijo el vocero Ari Fleischer.
Agregó que el mandatario estadunidense ofreció a Putin ayudar a "Rusia en todo lo que necesite", pues "este es un tiempo de solidaridad con Rusia".
El secretario de Estado, Colin Powell, expresó su esperanza de que la toma de rehenes finalice en forma pacífica. Su declaración se dio poco antes de que se confirmara la muerte de una rehén.
Gran Bretaña, Francia, Italia, Holanda y la Unión Europea se sumaron a la condena a la toma de rehenes en Moscú y reclamaron su liberación inmediata.
En similares términos se pronunció la Organización del Tratado del Atlántico Norte, mientras Amnistía Internacional y Human Rights Watch llamaron a los rebeldes a liberar a los cautivos y a rendirse.
También emitieron condenas y solidaridad con Rusia el primer ministro israelí, Ariel Sharon, y el presidente palestino, Yasser Arafat.
En general, todos los países coincidieron en que es necesario proseguir la lucha antiterrorista internacional, y la UE dijo que por ahora no hay "ninguna acción conjunta prevista" con Rusia.
DPA Y AFP