No será a corto plazo porque requiere esquemas jurídicos, justifica Fernández Ortiz
Arrancará en 2004 el programa de blindaje agropecuario: coordinador del Procampo
Considera la redefinición geográfica de cultivos, mercados y nueva tipología de campesinos
MATILDE PEREZ U.
El blindaje agropecuario -en cuya preparación el gobierno mexicano avanza con titubeos, según consideración del Banco Mundial- no se pondrá en marcha hasta 2004, afirma el coordinador del Programa de Apoyos Directos al Campo (Procampo), Juan Antonio Fernández Ortiz, quien sostiene que dicho programa traerá consigo la redefinición geográfica de la producción agrícola y de los mercados, una nueva tipología de productores y la restructuración de los programa de Alianza para el Campo para redistribuir los recursos y evitar que por los estrechos márgenes de acción se pierda del dinero.
Las definiciones para el blindaje agropecuario ya están, afirmó; en ellas están los paquetes que hay para los productores con posibilidades de competir con los agricultores de Estados Unidos y Canadá; otras para los campesinos intermedios y las correspondientes para quienes producen para el autoconsumo y están en pobreza extrema. Lo que está por definirse son los parámetros.
Puntualizó que el blindaje agropecuario contempla, como lo solicitaron organizaciones de productores y del Congreso Agrario Permanente, el establecimiento de tres grupos: el tecnificado, que comercializa en el mercado nacional y exporta; el que está en pobreza extrema y pobreza, que apenas siembra para autoconsumo y requiere apoyos y el grupo intermedio, el productor que no está en sistemas de autoconsumo pero tampoco está tecnificado y no tiene excedentes de producción.
En este último grupo, abundó Fernández Ortiz, podrían estar los productores que tienen no más de cinco hectáreas, que no son altamente rentables pero tampoco están en pobreza extrema. Por ello, "lo que estamos trayendo como teoría es que por cadena, por sistema productivo se fijen los parámetros de la tipología de los productores y a partir de ella entregar los apoyos diferenciados. No tiene caso que se otorguen recursos de Procampo a un productor tecnificado que tiene excedentes y exporta, ni tampoco dar apoyos a un productor de autoconsumo cuando lo que necesita son apoyos de subsistencia".
Mapa de productores especializados
Este proceso, agregó, empezó con el padrón de cafeticultores, siguió con los de piña, continuó con los de cacao y actualmente ya hay un panorama de los agricultores especializados en una decena de productos. "Cuando recibimos esta administración no sabíamos quiénes comercializaban sus siembras de sorgo, maíz y trigo, por ejemplo, porque las entregaban a empresas intermediarias como Minsa y Maseca, entre otras. Ahora vamos a poder tener un mapa de dónde están los productores, cuántas hectáreas siembran, sus niveles de productividad y a partir de esos datos encontrar la manera de ayudarlos."
En realidad, comentó el coordinador de Procampo, el blindaje agropecurio sería realmente para los agricultores que tienen producción excedente y exportan, pero también para los campesinos pobres y los productores medios, grupo al cual se mantuvo en el olvido porque no estaba dentro de los dos parámetros establecidos; ahora habrá un corte puntual de acuerdo a las principales características de cada cultivo.
Fernández Ortiz aseguró que en el blindaje agropecuario el grupo de los productores medios será fortalecido porque es el que proporciona los alimentos para los mercados regionales. "Hoy apenas los estamos ubicando: dónde están, cuántos son y su volumen de producción; sabemos que son parte esencial en la conservación de la soberanía alimentaria, para definir los cupos de importación de granos y para redefinir programas y establecer los especiales."
El año pasado, comentó, la Subsecretaría de Desarrollo Rural de la Secretaría de Agricultura, Gadanería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) comenzó la restructuración de los programas de Alianza para el Campo con la visión de tres grandes grupos: desarrollo rural, capacidades y tecnificación. "Con esta gran estructura evitamos los cajoncitos y se logra tener una mejor maniobrabilidad porque el presupuesto estará orientado a integrar en grandes rubros las partidas, no encajonarlas, porque a veces son tan estrechos los márgenes que no es posible apoyar al productor porque no cubre los requisitos y se pierden los recursos. Es una nueva política de acomodar los programas y maniobrar con los productores."
Fernández Ortiz mencionó que con esa nueva tipología de productores habrá otra geografía de la producción agropecuaria, se conocerá dónde están los diversos cultivos y el uso del suelo.
Con esa nueva geografía también se tendrá información de cómo están distribuidos los mercados de consumo y cuál es su demanda; no es lógico que a veces los productos lleguen a la ciudad de México para ser redistribuidos. Habrá mejores rutas, los productores podrán planear sus siembras de acuerdo con los mercados que hay alrededor, a la capacidad de consumo y quizá puedan entrar a la agricultura por contrato.
"Esta geografía de la agricultura montada a la de los mercados de consumo dará directrices muy claras de dónde sembrar, cómo y qué. Habrá una vinculación con las agroindustrias y almacenes, lo que demandan las grandes cadenas comerciales. Se dará prioridad al mercado local y, sin descuidar lo que hoy está manejando, Apoyos y Servicios a la Comercialización Agropecuaria (Acerca) seguirá apuntalando la exportación de los productos competitivos".
Fernández Ortiz dijo que el blindaje agropecuario también incluye el programa de rejuvenecimiento de la fuerza laboral en el campo, ya que la edad promedio actualmente de los beneficiarios de Procampo es de 58 años, aunque hay estados donde se eleva a los 63 años, y en pocos se estandariza a los 48. "Hay preocupación por la edad de los campesinos, el abandono de la tierra de cultivo y por lograr la compactación de las parcelas, para lograr revertir esa tendencia ya se estudian modelos de Francia y España."
Pero, advirtió, ese programa no es a corto plazo, arrancará en 2004 con el respaldo de otras secretarías, entre ellas la de Reforma Agraria, porque el programa requiere esquemas jurídicos.
"El principio de la Sagarpa es que si se otorga seguridad jurídica al campo, se logra el proceso de permuta y arrastra al rejuvenecimiento de los propietarios de la tierra, se ataca el problema de las tierras abandonadas, logra su compactación y atrae inversión. Si ello se logra en esta administración se consolida la reforma estructural del campo. Antes, habrá programas pilotos para hacer este proceso en el norte y centro sur del país, por lo pronto no se han definido las entidades en donde pueda aplicarse", expuso.
Finaliza en diciembre censo cafetalero
También involucrado en el censo cafetalero, el coordinador de Procampo indicó que ya concluyó el primer levantamiento y ahora hay registrados 401 mil productores, cifra 1.4 veces mayor al censo de 1992; pero también revela que hay una pulverización de la propiedad ya que mientras hace diez años un productor tenía 2.5 hectáreas en promedio, ahora posee 1.3 hectáreas.
La primera etapa del censo, señaló Fernández Ortiz, ya terminó, no se ha cerrado el proceso de inscripción. "Tenemos la lección que dejó Procampo, si se cierra un padrón se lleva el riesgo de dejar gente fuera; por eso, la decisión es dejar el padrón abierto hasta el 31 de diciembre, por lo que en las zonas rurales ya se hacen llamados a los campesinos para que acudan a las ventanillas, incluso hay brigadas que recorren los lugares. También se busca verificar que lo que esté en el padrón sea cierto".
De todos maneras el padrón no se cerrará permanentemente, siempre habrá una mesa en los consejos estatales de café para que los productores puedan darse de alta; pero ya no habrá un aparato presupuestario para verificar superficies.
Respecto a los pagos del programa emergente de café (PET) dijo que ya está pagado en 80 por ciento y a esos recursos se suman los del fondo de estabilización, que es un apoyo a la comercialización del café. "Posiblemente en el fondo de estabilización está el temor de que no se ejerzan los recursos correspondientes a este año y que el monto pueda perderse, eso no ocurrirá porque estamos hablando de recursos que están en un fideicomiso, no hay el riesgo de que se pierda.