La dependencia de los recursos petroleros no es tan alta como se piensa, aseveró
Insistió Gil en que no habrá huelga en Pemex
Aseguró que se alcanzarán las metas de inflación de 4.5% y déficit fiscal de 0.65
ROSA ELVIRA VARGAS Y ANTONIO CASTELLANOS
El titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Francisco Gil Díaz, afirmó anoche categórico: "no habrá huelga en Pemex". La dependencia del gobierno de los recursos petroleros no es tan alta como se piensa. Los impuestos de todas formas se cobran y en el caso particular del problema laboral "les puedo asegurar que no habrá nada trascendente. Habrá una actitud responsable de las dos partes y todos trabajaremos normalmente".
Gil Díaz habló de manera escueta con los reporteros poco antes de participar en el foro Deuda Pública, organizado por la Fundación Rafael Preciado Hernández y después ante los asistentes. Dio un informe detallado sobre la deuda pública del gobierno federal y aseguró que el déficit fiscal de 0.65 y la inflación de 4.5 por ciento fijadas por el Banco de México serán alcanzados por el buen manejo de la política fiscal y monetaria.
En la misma reunión, el subsecretario de Hacienda, Agustín Carstens, manifestó que la deuda externa calculada en 73 mil millones de dólares es ampliamente manejable y no pone en riesgo la estabilidad económica del país. Los plazos han sido ampliados. Se han logrado tasas menores y no hay vencimientos que presionen las finanzas públicas.
En la misma reunión, Mario Rodarte, director del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), afirmó que la deuda interna ciertamente es manejable pero tiene congestionada a la economía y no hay muchos recursos disponibles para financiar al sector privado.
En el encuentro, el secretario de Hacienda manifestó que los requerimientos financieros del sector público a junio del presente año ascienden a 2 mil 500 millones de pesos y representan 35 por ciento del producto interno bruto (PIB), pero aclaró que esta cifra es manejable y no representa ninguna presión para el gobierno federal.
En su exposición, Gil Díaz sostuvo que es necesario que el Congreso apruebe pronto las reformas estructurales porque ello podrá garantizar que al final del sexenio se puedan generar por lo menos un millón 245 mil empleos y un PIB de 7 por ciento. De lo contrario podrán crearse únicamente 730 mil nuevas fuentes de empleo y el crecimiento del PIB sólo será de 4.1 por ciento.
El funcionario destacó que la administración federal ha privilegiado el endeudamiento interno y han disminuido el externo. Este plan y la estabilidad macroeconómica del país ha permitido emitir bonos a tres, cinco y 10 años a tasa fija, lo que representa la confianza de los inversionistas en la estabilidad que tendrán los rendimientos en el largo plazo.
Durante la reunión habló también Carlos Isoard, de la junta de gobierno del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario, y manifestó que a junio del presente año la deuda de ese instituto asciende a 810 mil millones de pesos y que para evitar quebrantos en los bancos mantienen, junto con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, una red de supervisión que alerta de manera oportuna cualquier situación de deterioro, insolvencia o riesgo de quiebra de cualquier institución.