Continúan frágiles las condiciones
de la región, dice
Registrará América Latina tasa negativa
de 0.6%: FMI
Ya son 20 años de crisis recurrentes, apuntan
los analistas
ROBERTO GONZALEZ, JIM CASON Y DAVID BROOKS ENVIADO
Y CORRESPONSALES
Washington, 25 de septiembre. Un círculo
interminable de crisis envuelve a América Latina. La región,
incapaz de sostener tasas positivas de crecimiento por periodos prolongados,
comenzó a resentir un fuerte deterioro económico que tiende
a profundizarse a exactas dos décadas de que estalló la crisis
de la deuda externa.
Un informe difundido hoy por el Fondo Monetario Internacional
(FMI) aseguró que "la economía y la situación financiera
de América Latina se deterioró en la primera mitad de 2002
y se mantiene frágil", en contraste con lo que ocurre en otras regiones
del planeta.
El FMI anticipó que la economía latinoamericana
registrará este año una tasa negativa de 0.6 por ciento,
cuando apenas en abril pasado, la última ocasión que el organismo
había hecho un pronóstico, estimó que crecería
0.7 por ciento.
Las cifras pusieron de relevancia la incapacidad de la
región, azotada por dos décadas de crisis permanente, de
lograr tasas sostenidas de crecimiento. En 2000, el producto interno bruto
(PIB) latinoamericano tuvo un incremento de 4.0 por ciento; en 2001, la
variación fue de 0.6 por ciento, que cambiará a una tasa
negativa de 0.6 por ciento en 2002, para luego aumentar 3.0 por ciento
en 2003, de acuerdo con la información divulgada este miércoles
por el FMI en el Panorama de la economía mundial (WEO, por
sus siglas en inglés).
La presentación del WEO marcó hoy el inicio
de la tradicional reunión de otoño del FMI y el Banco Mundial,
que este año tiene de nuevo como contexto de referencia de la profundización
de la crisis en varias de las más importantes economías latinoamericanas
-especialmente Argentina y en menor medida Brasil- y la afirmación
del Fondo Monetario Internacional de que el crecimiento en general de la
economía mundial será menor al esperado hace apenas unos
meses.
Un factor que influyó en el nuevo tropezón
económico de Latinoamérica fue la profundización de
la crisis en Argentina, país que hasta hace poco fue considerado
el alumno más avanzado para instrumentar las políticas del
FMI y que, en palabras del organismo, "experimenta una contracción
de magnitud sin precedente en su historia económica".
''Una parte significativa del menor desempeño de
las economías latinoamericanas en los primeros meses de 2002 obedece
a la crisis en Argentina y los efectos que tendrá en algunos de
sus vecinos, especialmente Uruguay y Paraguay'', señaló este
miércoles el FMI.
El economista en jefe del FMI, Kenneth Rogoff, lo expresó
en estos términos: "en cuatro años, el PIB de Argentina registra
una caída de 20 por ciento, que equivale a dos veces el efecto de
la recesión de Estados Unidos de los años 30. El país
está en medio de una crisis trágica y sin precedentes".
Según las proyecciones divulgadas hoy, el FMI
anticipó que el producto interno bruto de Argentina registre este
año una caída de 16 por ciento, que se adicionará
a las tasas negativas de 0.8 y 4.4 por ciento reportadas para 2000 y 2001,
respectivamente. En 2003, habrá un incremento moderado de 1.0 por
ciento.
Uruguay, de acuerdo con el pronóstico del organismo,
tendrá este año una contracción de 11.1 por ciento
y seguirá en el terreno negativo en 2003, con una caída de
4.5 por ciento. Es un caso particular, pues de cumplirse las previsiones
del FMI, este país redondeará cuatro años en recesión:
en 2000 su economía se contrajo 1.4 por ciento y, en 2001, lo hizo
en 3.1 por ciento.
Brasil, la principal economía latinoamericana,
crecerá este año 1.5 por ciento, el mismo porcentaje del
ejercicio previo y que representa alrededor de una tercera parte del logrado
en 2000, cuando el PIB de ese país aumentó 4.4 por ciento.
"En contraste con los signos de recuperación en
la mayoría de las otras regiones, las condiciones económicas
y financieras de América Latina se deterioraron en la primera mitad
de 2002 y se mantienen frágiles", señaló el FMI. "El
crecimiento de la región se contrajo 2.5 por ciento en el primer
trimestre de este año, en comparación con el último
trimestre de 2001, y es previsible que se mantenga negativo en todo 2002".
Un pronóstico hecho ayer que poco tiene de diferencia
respecto de las últimas dos décadas.