Teorema inmóvil cumple el sueño del artista de mostrar la obra en el espacio óptimo
Develan mural escultórico de Felguérez creado para celebrar 50 años del Auditorio Nacional
Mañana abren su exposición Preview. Una revisión histórica en el Centro de las Artes
CARLOS PAUL
Teorema inmóvil es el más reciente mural escultórico -de 28 toneladas- de Manuel Felguérez, destacado artistas plástico abstracto, obra realizada ex profeso que fue develada ayer en el vestíbulo del Auditorio Nacional para conmemorar el 50 aniversario del recinto.
Desde hace más de 40 años el maestro Felguérez se ha especializado en la creación de diversos murales escultóricos siempre en búsqueda ''de que cada uno sea mejor y una novedad para la plástica".
Su título, comenta el artista, ''hace referencia por un lado al teorema, el cual se traduce como ecuación matemática que se demuestra a sí misma. Aquí es una ecuación trasladada y expresada en geometría; y es su exactitud y su alarde de estar volada en el muro lo que exige un cálculo exacto. Por eso se llama teorema y por su apellido de inmóvil aspira a ser una obra permanente en su tiempo y en su espacio".
De 16 metros de largo y seis de alto, con una pátina de plata, la obra enmarcada en el arte abstracto ''pretende expresarse sólo por su color, forma y composición, para que quien la vea sienta emoción. No tiene un significado anecdótico. Es lo que es en sí misma", comentó en entrevista Felguérez, de quien mañana a las 19:30 horas se abrirá la muestra Preview. Una revisión histórica. La máquina estética, en la galería del Centro Multimedia del Centro Nacional de las Artes, recinto que llevará el nombre del artista zacatecano.
Asumir el reto de crear
Luego de agradecer el honor de ser invitado para crear esta obra, en el acto el artista plástico recordó su primer mural escultórico en el cine Diana, el cual ''provocó una fuerte polémica que sólo terminó cuando el jurado de la primera Bienal de Escultura, organizada por el Instituto Nacional de Bellas Artes, me otorgó el Premio Integración Plástica con la Arquitectura.
''Siempre he aceptado el reto de la creación -expresó Felguérez-, nuevas formas, nuevos materiales, buscando, experimentando soluciones para relacionar la obra con los espacios elegidos. He conservado la ilusión de que cada obra sea superior a la anterior, pretensión que sólo algunas veces he podido lograr. Teorema inmóvil es un sueño cumplido, que la escultura se muestre en un espacio óptimo."
La exhibición del mural escultórico se suma a las obras La Luna, de Juan Soriano; Escenario 750, de Vicente Rojo, y al telón tejido a mano, reproducción de Las sandías, de Rufino Tamayo, entre otras.
Trabajo de espléndida madurez
La develación, que se inició con espera de casi una hora, estuvo a cargo de Reyes Tamez, secretario de Educación Pública; Sara Bermúdez titular del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes; Enrique Semo, secretario de Cultura del DF; María Cristina García Zepeda, coordinadora ejecutiva del Auditorio Nacional y Teodoro González de León, quien comentó que la obra fue creada ex profeso para ese recinto. ''El trabajo de Felguérez es una sorpresa maravillosa", expresó el arquitecto.
Abraham Zabludovsky, quien con González de León es el artífice del Auditorio Nacional, recinto que fue ''transformado por completo" en 1991, opinó que ''esa es la mejor obra que ha hecho el maestro Felguérez. La integró a esta nueva arquitectura de una manera notable".
Para Fernando González Gortázar, esa escultura es ''un trabajo de madurez espléndido en el que se entendió muy bien la relación entre el arco del puente del edificio y la escultura misma donde está ubicada, mientras que para el autor de La Luna, Soriano, el mural escultórico ''es un trabajo maravilloso y es, en la carrera de Felguérez, una cúspide. Su obra me provoca ponerme a hacer más escultura".