Crean comisión especial que decidirá el contenido de la respuesta al Informe

Equilibrio y transparencia, acuerdan diputados del PRD

RAUL LLANOS SAMANIEGO

Con el tema del dinero y los puestos administrativos en el centro de la discusión, la dividida fracción del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal se reunió ayer en privado con su dirigencia capitalina, y después de más de dos horas de reclamos y llamados a la mesura se estableció un nuevo acuerdo político, que implicará un reacomodo al interior de la bancada parlamentaria.

Según éste, se crea una comisión especial de diputados y líderes del partido del sol azteca, en la que estarán representados los legisladores perredistas de los tres grupos conocidos como de los tres, los seis y los nueve, quienes tendrán bajo su responsabilidad la revisión de la integración de la mesa directiva de la fracción y los cargos administrativos, que lleve a que todas esas corrientes políticas estén representadas de manera equilibrada.

También se estableció el compromiso puntual de transparentar los recursos que mensualmente reciben los 19 legisladores del PRD, vía la coordinación parlamentaria, encabezada por Alejandro Sánchez Camacho, y definir los criterios de asignación.

Al encuentro, efectuado en la sede capitalina de este partido, acudieron 17 diputados, sólo faltaron Armando Quintero, que argumentó al mediodía que no lo habían invitado, y Edgar Torres, quien está convaleciente. Por el Comité Ejecutivo Estatal estuvieron presentes Víctor Hugo Círigo, Agustín Guerrero, Lorena Villavicencio, Agustín González, Fernando Belanzaurán y Mariano Mejía.

La misma comisión que hoy por la mañana se integrará formalmente también establecerá, entre otras prioridades, el contenido de la respuesta al Informe del jefe de Gobierno. Incluso se establecerán mecanismos de colaboración institucional entre el CEE, los diputados y el gobierno de la ciudad de México.

Los integrantes de la citada comisión son: Círigo, Guerrero y Villavicencio. Por el grupo de los nueve, Alejandro Sánchez Camacho; grupo de los tres, Horacio Martínez Meza, y grupo de los seis, Ricardo Chávez.

De reclamos y acuerdos

La reunión de los perredistas fue convocada para las 17 horas. Fieles a su costumbre, iniciaron una hora más tarde, y contrarios a su frase recurrente: "No hay nada que ocultar", se hizo a puerta cerrada. El ambiente era tenso; pocos resultados se esperaban luego de que por la mañana fracasara una reunión convocada por Sánchez Camacho para empezar a allanar el camino.

Por la tarde, las casi dos horas iniciales se fueron en quejas, protestas, reclamos de uno y otro lados. Así por ejemplo, Gilberto Ensástiga reclamaba a los diputados de la CID que no se les diera información de los dineros que recibe la fracción y que fueran precisamente los de esta corriente quienes monopolizaran los puestos administrativos.

Horacio Martínez secundó la inconformidad y pedía que se aclararan los recursos públicos de los 19 diputados y avalaba la necesidad se establecer un nuevo acuerdo. Carmen Pacheco alegaba que era necesario mostrar voluntad política para ello y dejar de lado la cuestión administrativa.

Clara Brugada alertó acerca de la necesidad de sacar pronto un consenso, pues estaba en puerta la situación electoral, que de agarrarlos divididos sólo beneficiaría a los partidos de oposición. Dione Anguiano y Susana Manzanares tomaron la palabra para aclarar que cuando Armando Quintero era el coordinador tampoco había transparencia en los recursos y nadie decía nada, y reclamaban que las filtraciones a los medios de comunicación habían generado confusiones en el uso del dinero y servía sólo para que algunos diputados llevaran agua a su molino.

Así, después de reiterar los mismos argumentos entre unos y otros, se concretó el acuerdo que después fue presentado por Víctor Hugo Círigo en una conferencia de prensa en la que no se aceptaron preguntas de los reporteros.