Asesinan al jefe del servicio secreto de Antioquia
Mueren al menos 109 rebeldes por ofensiva del ejército colombiano
AFP
Santafe de Bogota, 5 de septiembre. Al menos 109 guerrilleros murieron en los últimos días por una ofensiva aérea y terrestre, mientras que otras 30 personas, entre campesinos e indígenas, fallecieron en incursiones de los propios insurgentes o de paramilitares, que dejaron igualmente cientos de desplazados, reportaron mandos militares.
La violencia también alcanzó hoy al designado jefe del servicio secreto (DAS) en el departamento de Antioquia, Fernando Enrique Mancilla, asesinado por desconocidos en la ciudad de Medellín, la capital provincial. Otras dos personas murieron y nueve más resultaron heridas al explotar una bomba en un supermercado del municipio de Dosquebradas.
El subcomandante de la fuerza aérea co-lombiana, general Edgar Lesmes, dijo que al menos 109 rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) murieron en combates en las cercanías del municipio La Uribe (120 kilómetros al sureste de esta capital), en la otrora zona de distensión para negociaciones de paz que fracasaron.
Lesmes indicó que las FAC y tropas terrestres llevaron a cabo operaciones en La Uribe para arrestar al líder guerrillero Henry Castellanos, alias Romaña, quien comanda un escuadrón de las FARC.
"Es una operación que venimos ejecutando desde hace varios días. En los ametrallamientos a la zona pudimos constatar que al menos cien guerrilleros han sido abatidos y logramos encontrar un campamento donde presumimos se encontraba Romaña", sub-rayó el subcomandante de la fuerza aérea.
Por otra parte, fuentes humanitarias y líderes indígenas señalaron que al menos 12 indígenas y campesinos murieron desde el fin de semana pasado y otros mil debieron abandonar sus parcelas tras incursiones de comandos paramilitares de extrema de-recha, en varias aldeas del departamento de La Guajira (fronterizo con Venezuela).
El defensor del pueblo del municipio guajiro de San Juan (mil 300 kilómetros al norte de Bogotá), Roberto Daza, dijo que la incursión de los escuadroneros también provocó el desplazamiento hacia el casco urbano de San Juan de unos mil labriegos procedentes del caserío de Caracolí.
En La Guajira, donde hay una mina de carbón explotada por una compañía estadunidense, también operan las FARC y los rebeldes del Ejército de Liberación Nacional, con 4 mil efectivos en todo el país.
Asimismo, unos 60 indígenas llegaron este jueves a la ciudad de Cúcuta (600 kilómetros al noreste de Bogotá, en la frontera con Venezuela) huyendo del asedio de los rebeldes y los paramilitares que operan en la selvática y cocalera región de Catatumbo, de acuerdo con entidades humanitarias del departamento Norte de Santander.
Otros cuatro campesinos fueron asesinados el miércoles anterior por presuntos paramilitares en una aldea del municipio de Timbío (600 kilómetros al suroeste de la capital, en el departamento de Cauca), informó la policía.
Asimismo, 11 labriegos murieron a ma-nos de presuntos rebeldes de las FARC en Juan Nepomuceno (950 kilómetros al norte) y otras localidades del caribeño departamento de Bolívar, donde igualmente permanecen secuestradas otras seis personas, de los que se teme que también fueron baleadas.
El presidente Alvaro Uribe, en funciones desde el pasado 7 de agosto, ordenó hace cuatro semanas reforzar la vigilancia en los campos y carreteras de diversas regiones del país para prevenir incursiones y secuestros masivos por parte de los difentes grupos armados.
En esas labores de vigilancia también participan civiles reclutados por el gobierno como informantes del ejército.