Realizan el primer Encuentro de Cronistas dentro del Festival de la Huasteca
Las ''historias pequeñas'' se deben difundir
Participantes de seis estados llaman a profesionalizar esa labor cultural
ARTURO JIMENEZ ENVIADO
Tamazunchale, SLP, 16 de agosto. El cronista ya
no debe ser sólo la persona que recopila leyendas y anécdotas
mediante el uso de su imaginación, sino un profesional que conozca
la problemática de su localidad y de su región, cuya labor
sea una parte importante del desarrollo municipal.
Con un amplio trabajo muchas veces a contracorriente,
basado en una vocación y casi siempre sin apoyo de los gobiernos
municipales y estatales, los cronistas locales también saben de
la necesidad de descubrir y difundir las ''historias pequeñas",
por lo general olvidadas bajo el manto de la gran ''historia general".
Lo
anterior es parte de las reflexiones de la sesión inicial del primer
Encuentro de Cronistas que se realiza como parte del séptimo Festival
de la Huasteca y que ya ha generado algunas propuestas: crear una asociación
de estos seres ''amorosos de la historia" y un libro de autoría
colectiva.
El festival reúne a investigadores y creadores
de los seis estados que abarca la región Huasteca: San Luis Potosí,
Hidalgo, Tamaulipas, Querétaro, Puebla y Veracruz.
''Amorosos de la historia"
Nueve fueron los cronistas que participaron en la primera
jornada de trabajo, moderados por Eduardo Hernández, instructor
y promotor cultural del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
Aparte de los estudios universitarios, muchos de posgrado,
así como el humanismo, estos cronistas se caracterizan por su férrea
voluntad de trabajo, franqueza y optimismo. Todos además son periodistas
de radio o prensa escrita, autores de libros, editores de revistas, maestros
y hasta músicos.
Primera mujer cronista de Tamaulipas, Carolina Infante
Pacheco, de Ciudad Madero, criticó que es más fácil
que compañías cerveceras y refresqueras apoyen al futbol
que las autoridades asignen recursos a la cultura.
Ser cronista no sólo es contar historias sino también
saber de leyes o defender el patrimonio cultural de los pueblos y ciudades,
recordó Marco Antonio Hernández, del puerto de Tampico.
Como cronista, dijo Demóstenes Frías, de
Landa, de Matamoros, Querétaro, lo esencial es la vocación.
''También debemos pensar como jóvenes, pero no somos eternos
y debemos formar cuadros".
Impulsor del encuentro, el anfitrión, Apolinar
Pérez Domínguez, dijo que a pesar de que las leyes potosinas
obligan a tener un cronista local, en Tamazunchale aún no se formaliza
ese nombramiento. Habló de profesionalizar esa actividad y propuso
crear una asociación de la Huasteca.
''Los cronistas estamos para morir de hambre", dijo Tomás
Zerón Amador, de Huejutla, Hidalgo.
Arturo Allende Téllez, de Huauchinango, Puebla,
fue quien abordó el tema indígena.
Abelardo Castillo, de Antiguo Morelos, Tamaulipas, dijo:
''Estamos unidos porque somos de la misma región, pero separados
administrativamente". Y recreó antiguas enseñanzas: ''Necesitamos
educar a nuestros hijos como pobres para que vivan como ricos", dijo.