Al amparo del TLC se incrementa el contrabando, en especial de productos de China

Clonan facturas y certificados de origen en Manzanillo: Comce

En el ramo textil las prendas ilegales llegan a 66 por ciento, denuncia el consejo de comercio

La industria, en vías del desastre, aseguran exportadores que piden privatizar sistema aduanero

HUMBERTO ORTIZ MORENO

El Consejo Mexicano de Comercio Exterior (Comce) denunció que prevalece una enorme corrupción en el puerto de Manzanillo, Colima, donde, reveló, ocurre toda clase de irregularidades como la clonación de facturas y certificados de origen que, al amparo del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), incrementan el contrabando y la triangulación de productos de diversa procedencia, especialmente los chinos, en perjuicio de la industria nacional.

Estas prácticas son conocidas como "contrabando técnico", mediante el cual a las mercancías asiáticas les imprimen etiquetas canadienses o estadunidenses y entran a territorio mexicano sin restricciones.

Y es que la situación es tan grave que, solamente en el ramo textil, hoy las dos terceras partes de las prendas, es decir 66 por ciento del mercado nacional, son de contrabando y la industria está en vías de desastre.

"Es una verdadera tragedia", deploró el presidente del organismo que concentra a las principales empresas exportadoras del país, Carlos Rojas Magnon.

En consecuencia, demandó la privatización del sistema aduanero nacional toda vez que la corrupción "ya no puede ser peor" y ha tocado fondo. Incluso, previno a la Secretaría de Economía para ser cautelosa en la firma de un tratado de libre comercio con Panamá, porque en ese país solamente hay tres plantas industriales y el resto son instituciones financieras de dudosas operaciones y actividades comerciales con posibles prácticas ilícitas hacia Norteamérica.

En entrevista con La Jornada, Rojas Magnon propuso arrancar la privatización con un periodo de seis meses de experimentación concesionando el servicio aduanero a la empresa suiza Societé Generale que, en el sexenio antepasado, fue contratada por el entonces titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Pedro Aspe Armella, para realizar un proyecto similar y los resultados del trabajo jamás fueron dados a conocer a la nación.

"A ver si de esa forma podemos mejorar la honestidad", expresó.

Reconoció que las autoridades han hecho innumerables esfuerzos y aplicado acciones en las aduanas, pero simplemente no han operado frente a las poderosas mafias e intereses creados que manejan el tránsito de mercancías que fluyen por las fronteras, frente a una estructura aduanera débil por la falta de presupuesto.

Rojas Magnon recordó que la Administración General de Aduanas, a cargo de José Guzmán Montalvo, ha relevado ya a prácticamente todo el personal aduanero, pero la clonación de certificados de origen y facturas sigue en todo su apogeo.

"Nada más hay que decirles de qué se trata a los agentes y lo que uno quiera ahí se consigue", lamentó.

El presidente del Comce juzgó que han fallado los sistemas de selección y capacitación de funcionarios, pues los estudios demuestran que cuando la gente acude a las convocatorias de la SHCP "tiene motivaciones equivocadas y generalmente son las mismas que ha observado en los que trabajan en las aduanas: hacerse ricos rápidamente y extorsionar a los importadores y exportadores".

Y entonces, por ejemplo, se les hace sencillo cambiar cuotas de diversos productos para abaratar el ingreso al país a los importadores.

Rojas Magnon recordó que cuando Francisco Gil Díaz, actual secretario de Hacienda, era subsecretario de Ingresos, la autoridad fiscal y aduanera dispuso un experimento de la aduana de Nogales y puso a prueba la operación de la empresa suiza Societé Generale, que se hizo responsable de la administración.

"Desgraciadamente el secretario de Hacienda (Aspe) salió antes de que hubiera una conclusión y entonces, como siempre, el siguiente (José Angel Gurría) detuvo los programas que él no inventó, se acabó el contrato y ya no nos enteramos del resultado del experimento".

Se manifestó por retomar este proyecto porque en la actualidad, por los niveles de corrupción observados, "peor está difícil que se ponga".

Rojas Magnon externó su preocupación porque de no tomarse medidas urgentes para corregir esta situación en las aduanas, varias cadenas productivas, como la textil, están en riesgo de desaparecer por falta de mercados.

El dirigente de los grandes exportadores hizo ver que el tema del puerto de Manzanillo ha sido tratado repetidamente por los empresarios en reuniones con autoridades gubernamentales. "Nos piden que denunciemos este tipo de actos, pero el problema es que nosotros no podemos dedicarnos a eso".

Negocio abierto

Basta observar, comentó Rojas, que en los alrededores del Palacio Nacional, donde hay oficinas de Hacienda y aduanas, se ofrece abiertamente toda clase de mercancías de contrabando, a 2 mil dólares el tráiler.

"Si hay un exceso de tolerancia de las autoridades, sería terrible porque podría acabarse con ramas completas del aparato productivo", remarcó.

Sobre el eventual TLC con Panamá, Rojas enfatizó que el Comce estará en el "cuarto de al lado" para asegurarse que las autoridades negocian con cuidado los asuntos de reglas de origen y suficientes salvaguardas para evitar prácticas ilegales de comercio.