Enfrentar la suspensión de aranceles en 2003, objetivo
Pedirán productores de cebada de Hidalgo apoyos al Congreso
En Veracruz, agricultores exigen al gobierno federal decretar en "estado de desastre" al sector arrocero, por excesivas importaciones
CARLOS CAMACHO Y ANDRES MORALES CORRESPONSALES
Los más de 30 mil productores de cebada del altiplano mexicano pedirán al Congreso de la Unión que les otorgue apoyos extraordinarios para poder enfrentar las desventajas que tienen con agricultores de Canadá y Estados Unidos, a consecuencia de la suspensión de aranceles a las importaciones que entrará en vigor el primero de enero de 2003.
Pedro Rodríguez Jiménez, dirigente de los cebaderos de Hidalgo, precisó que durante la reunión regional efectuada este viernes en Pachuca, Hidalgo, "llegamos a un punto de acuerdo para solicitar a los legisladores que se aprueben apoyos extraordinarios, o bien den facilidades mediante la devolución de nuestros impuestos".
Además, indicó que es insuficiente la producción de cebada maltera destinada a la industria cervecera, misma que este año alcanzó las 265 mil toneladas.
La calidad de la cebada que se produce en las 260 mil hectáreas del altiplano es "altamente competitiva, razón por la cual el grupo Modelo acapara la mayor parte del mercado mundial"; sin embargo, "esa cantidad es insuficiente".
Por otra parte, en Veracruz, la Federación Nacional de Productores de Arroz exigió al gobierno federal decretar en "estado de desastre" los cultivos de ese grano, debido a que en breve podrían desaparecer del país debido a los altos volúmenes de importaciones y ante la falta de apoyos a productores nacionales para competir con el cereal subsidiado que se trae, principalmente, de Estados Unidos.
Pedro Diez Haz, presidente de la citada organización, refirió que de 1994 a la fecha -cuando entro en vigor el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos-, la producción nacional de arroz descendió de 450 a 190 mil toneladas anuales, en tanto que el padrón de productores cayó de 12 mil a menos de 5 mil campesinos.
Agregó que de no revisarse el apartado de granos básicos dentro de dicho acuerdo comercial, el sector arrocero en México "prácticamente será aniquilado, pues en 2003 se tiene contemplada la liberación de fronteras para las importaciones de granos".
Manifestó, además, que los actuales niveles de importaciones ya se ubican por encima de 85 por ciento del consumo nacional, oscilando en 750 mil toneladas de arroz cada año, en comparación con las 190 mil toneladas que se producen localmente.