Señalan especialistas graves violaciones a los derechos humanos de estudiantes en México

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

En México son graves las violaciones de derechos humanos en el ámbito educativo, en particular el maltrato infantil y la discriminación contra estudiantes que profesan alguna religión, que están enfermos o pertenecen a alguna etnia, afirmó Gloria Ramírez, coordinadora de la cátedra Unesco en derechos humanos.

Al participar en el seminario Justiciabilidad de los derechos económicos, sociales y culturales, que concluyó ayer en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, dijo que el derecho a la educación es una asignatura pendiente en nuestro país, pues aunque la cobertura se ha incrementado, eso no da garantías de que la enseñanza sea de calidad.

Como parte de una iniciativa para acabar con la discriminación en los centros escolares, explicó que un grupo de organismos no gubernamentales está exigiendo al gobierno mexicano que ratifique la convención contra todas las formas de discriminación en materia de enseñanza, la cual fue suscrita en 1962 por la mayoría de los países en el mundo.

Señaló que este instrumento impulsado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura servirá para que, en principio, el gobierno mexicano reconozca que en las escuelas se practica la discriminación y el racismo.

Consideró que en México no se aborda el tema educativo desde la perspectiva de los derechos humanos, y por eso ocurren violaciones graves, como la discriminación en contra de niños indígenas o de los que pertenecen a los Testigos de Jehová.

Se refirió también a los casos de maltrato infantil que se dan en las escuelas y que no son sancionados porque, dijo, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación protege a los profesores en vez de sancionarlos.

Ramírez dio otros ejemplos de discriminación: cuando las escuelas expulsan o le niegan la inscripción a las alumnas que están embarazadas, o le niegan el acceso a niños o jóvenes que tienen alguna enfermedad.

Como parte del derecho a la enseñanza, señaló, en México se debería exigir el cumplimiento de promesas de campaña, como la que hizo el presidente Vicente Fox en el sentido de que al finalizar este sexenio se destinaría 8 por ciento del producto interno bruto a la educación.

Explicó que el derecho a la educación no se puede hacer efectivo mientras se destinen recursos insuficientes a la enseñanza pública y las autoridades del ramo asuman con "cierta naturalidad" que todavía existen niños que no tienen acceso a la primaria o que 40 por ciento de quienes están inscritos van a desertar.

Por su parte, Marisol Blanchard, del Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil), explicó que las víctimas de estas violaciones pueden recurrir a diversos organismos internacionales para hacer valer su derecho a la educación que, explicó, es fundamental, reconocido como tal tanto en los sistemas de protección de los derechos humanos como en el sistema interamericano, europeo y africano.

Indicó que la educación ha sido, desde los inicios de la Organización de Estados Americanos (OEA), un elemento muy importante para las naciones, las cuales han reconocido que es un derecho fundamental no sólo para cada persona, sino también como un requisito indispensable de una sociedad democrática.

Refirió que la población de América Latina puede demandar la aplicación del derecho a la educación por medio de diversos instrumentos, como la carta de la OEA, el Protocolo de San Salvador y la Convención de Belem do Para.

Blanchard expuso que hasta ahora el problema ha sido que poco casos relacionados con el derecho a la educación se han presentado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.