Schumi rompió todos los récords, dijo el canciller Schroeder
Miles festejaron la hazaña en las calles
DPA
Kerpen, 21 de julio. Unos mil fanáticos del automovilismo se reunieron frente al City Hall de la ciudad de Kerpen, para festejar el quinto título mundial de la Fórmula Uno logrado por Michael Schumacher, oriundo de ese lugar de Alemania.
El pueblo cercano a la ciudad de Colonia se vistió de "rojo Ferrari'' y deliró cuando el piloto alemán cruzó la meta en el Gran Premio de Francia. Incluso el cantante pop Juerguen Drews presentó su nueva canción Schumanía, cuya creación se convirtió en el himno de Kerpen, luego de la competencia.
En un telegrama enviado poco después de conocerse la victoria, el canciller alemán Gerhard Schroeder felicitó a Schumacher por el "grandioso éxito en su ya de por sí extraordinaria carrera. En la Fórmula Uno usted ha roto todos los récords y fijado nuevas medidas'', afirmó el jefe de gobierno.
Los festejos también fueron en varias ciudades y pueblos de Italia que se vieron invadidos por una marea roja de tifosi para celebrar la victoria del piloto alemán y de Ferrari, que sumó su tercer título mundial de constructores.
"Grande Schumi, tú eres el más grande'', cantaban y bailaban decenas de miles de aficionados por toda la península italiana, aunque el centro de la fiesta, como es habitual, fue en la ciudad de Ferrari, Maranello, en la que los habitantes realizaron una caminata hacia la fábrica de la escudería del caballito rampante.
En Roma, Milán, Nápoles y Turín se organizaron improvisadas fiestas callejeras, con cientos de autos por las avenidas haciendo sonar el claxon.
Igual ocurrió en las playas, donde la mayor parte de los bañistas se agolpaban a los bares cercanos para ver por televisión el éxito de Schuminator.
En tanto, la esposa del pentacampeón mundial, Corinna, señaló: "Creo que todavía no podemos darnos cuenta de lo que significa. Cinco veces es una locura".