TIEMPO DE BLUES
Raúl De La Rosa
De pérdidas anunciadas
Primera llamada
¿POR CUAL DE LOS múltiples personajes
-que habitan en la misma persona- comenzar? ¿Por el Wama,
el aficionado a la fiesta brava, con su ensortijada melena distinguible
en la primera fila del segundo tendido de sol por más de 30 años?
¿Por el antropólogo? (profesión en la que deviene
por la atracción de las historias contadas por sus abuelos) ¿Por
el musicólogo y bailador de danzón? ¿O por el investigador
que recopiló, anotó y vivió in situ el portento
del guadalupanismo, herencia paterna ineludible y apasionada?
LO RELEVANTE Y LAMENTABLE -a la vez- es que todos
desaparecieron físicamente, el pasado martes 25 de junio. No están
muertos, tan sólo no están vivos.
LA HISTORIA FAMILIAR, ES el otro personaje que
amalgama a los miembros de esa discreta progenie, los Zedillo-Castillo.
El abuelo, padre de León, velaba en el teatro Abreu los espacios
donde las emociones y risas que cada noche resonaban allí. Tras
bambalinas crecía Antonio, el más pequeño de los seis
hijos de León. De esa época, comentaba Toño
que: "El gusto por la música y el baile lo aprendí por nacimiento
en el teatro Abreu".
A PRINCIPIOS DEL SIGLO pasado varios teatros contaban
con alumbrado eléctrico, pero el ayuntamiento los obligó
a conservar algunas lámparas de petróleo o de aceite para
prevenir interrupciones. Es cuando el padre del Wama-Antonio, tiene
su papel con su oficio de electricista.
Segunda llamada
EL 25 DE MAYO de 1918 se inaugura el más
moderno teatro de la República: el Esperanza Iris (hoy de la Ciudad
de México), uno de los mejores sitios de la capital. La instalación
eléctrica la hizo León Zedillo.
LA REVISTA TEEUS en
1927 menciona que: "Nuestro camarada León Zedillo fue la primera
persona que puso la iluminación de foquitos en las fachadas de la
Catedral Metropolitana y de Palacio Nacional con motivo de las fiestas
del Centenario. En el teatro Esperanza Iris además está instalando
un aparato alemán que en caso de apagarse la luz, automáticamente
al hacerse oscuro, se enciende otra instalación". (Nadie imaginaba
que un nieto de este sencillo trabajador habría de usar ocho décadas
después el Palacio Nacional como despacho.)
TODAVIA HABRIAN DE VENIR otros hechos familiares
relevantes. María de los Angeles Estrella del Carmen Bonfil y Ferrer,
quien a los nueve años (1890) actuaba y cantaba en la Compañía
Infantil de Miguel Iglesias a los pocos años se convertiría
en la Reina de la Opereta: Esperanza Iris.
ESTA SORPRENDENTE MUJER HABIA dicho: "Dios me ha
dado todo a manos llenas... hasta el dolor". La artista tuvo cuatro hijos,
dos niños y dos niñas. Una murió al nacer; la otra
a los cuatro años y los hombres entre los 18 y 20 años de
edad. Al final de su vida artística, visita a la familia Zedillo-Castillo
en su casa y se registra la que habría de ser la última grabación
de su voz: "En unas horas que llevo en esta casa, de mi queridísimo
amigo León Zedillo, he disfrutado porque lo he visto sentado en
esta mesa con su esposa, sus hijos, sus nietos y he sentido una cierta
envidia de no haber visto, ni nunca tenido mi mesa así. Mis hijos
murieron muy jóvenes, no llegaron a casarse".
LA GRABACION CONTINUA: "SE le ocurre a Zedillo
hijo (o sea Toño), que quiero mucho, porque ese casi nació
en el Teatro Iris, me ha pedido que cuente un cuentecito para que les quede
aquí en su grabadora". Los cuentos quedaron grabados. Esperanza
Iris muere el 8 de noviembre de 1962.
Tercera llamada
EL HOMBRE ?AHORA YA? antropólogo, paga la
deuda de gratitud del niño, con doña Esperanza Iris. En 1989,
publica el libro más completo sobre la historia del Teatro de la
Ciudad, con el patrocinio del Gobierno del Distrito Federal. Las fotos
son verdaderas joyas, pues su padre León conservaba la mayor colección
de fotografías de casi todos los artistas que allí se presentaron
y cada programa de mano desde el día de su inauguración.
DURANTE SU VIDA LABORAL en el IMSS, Toño
publica varios libros: El Hospital Real de Naturales (1984) y La
historia de Oaxtepec; artículos sobre la música afromexicana
y se da tiempo para coordinar el libro de Yiyi Gasca, esposa de Agustín
Lara, sobre la relación epistolar entre el maestro y su joven esposa:
Un poco de nuestra vida (1992). Su afición al danzón
lo lleva a ser autor junto con Simón Jara y el cubano Aurelio Rodríguez
Yeyo de uno de los libros más completos sobre este género:
De Cuba con amor... el danzón en México (1994).
RESALTAR LA DISCRECION DE su ser y hacer es importante.
Aun en el sexenio pasado, cuando lo llamábamos medio en broma El
primer tío del país, no modificó su forma de vida,
ni sus amistades, permaneció intacto. Da rabia que en este país
tan necesitado de gente con esa entrega y pasión por los hechos
de su país ?como él decía? se vayan a edades tan tempranas
(66 años) y tan fructíferas. El número 278 de la primera
fila del segundo tendido de sol ya no contendrá al Wama,
uno de los reales aficionados al toro y a los hechos de su país.
¡Salud!
AVISO: POR FIN SE presenta el libro sobre la vida
y obra del compositor y pianista más fino del siglo xx: Mario Ruiz
Armengol. Escrito por el periodista Carlos Díaz Barriga, se titula
La calle de los sueños, lo mejor que se ha escrito sobre
el Señor Armonía. La presentación será
el martes 2 de julio a las 20 horas, en el Centro Veracruzano: Miguel Angel
de Quevedo 687, Coyoacán, bajo los auspicios del Instituto Veracruzano
de la Cultura y Ediciones Pentagrama.