ITACATE
Cristina Barros y Marco Buenrostro
Biblioteca gastronómica
ADEMAS DE SU aportación en el campo de los alimentos fermentados, Javier Taboada tuvo a su cargo la formación del banco de datos ''Alimentación básica y complementaria utilizada por las comunidades indígenas-campesinas de México", que se entregó en 1993 al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
ALGUNOS DE ESTOS temas se cubrieron con tesis de licenciatura dirigidas por el doctor Taboada; sus tesistas lo recuerdan con afecto, al igual que el personal del Instituto de Biología. Es el caso de María Elena Ortega, o de Carmen Coutiño, quien a lo largo de su trabajo de tesis entendió la cálida personalidad de Taboada y su interés por dar a conocer en el ámbito internacional la riqueza de nuestra cocina.
SU ADMIRACION POR la mujer mexicana que pone su creatividad y esfuerzo para dar de comer lo mejor a su familia, así como la conciencia de la importancia de la alimentación, llevaron a Taboada a iniciar en 1990, en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), una biblioteca sobre el tema. Personalmente se entrevistó con especialistas como Diana Kennedy, quien donó ejemplares de sus publicaciones; así lo conocimos nosotros. En 1998 reportó que la biblioteca contaba con 600 ejemplares y en la actualidad tiene 971 volúmenes, comenta Isabel Chong, responsable del fondo antiguo y reservado y de las colecciones especiales de la biblioteca. Clementina Díaz y de Ovando, a su vez, recientemente hizo una donación.
LA DIRECTORA DE la Biblioteca Central, Silvia González Marín, tiene especial interés en el fondo antiguo, así como en las colecciones; por ello se ha dado impulso a la biblioteca de gastronomía, pionera en su campo. Esta puede ser consultada por quien lo desee, sea universitario o no, con sólo presentar una identificación oficial; por las características de la colección, no hay préstamo a domicilio, pero se pueden hacer reprografías. Se encuentra en el noveno piso del edificio de la Biblioteca Central y los horarios son de diez de la mañana a cinco de la tarde. Ahí será amablemente atendido por Guadalupe Landa o Jorge Alberto Mejía.
ESTE ACCESO ILIMITADO a la consulta de la colección es una de las formas en que la UNAM cumple con la difusión cultural y el servicio a la comunidad. Mediante la terminal en computadora que se encuentra en la planta principal de la Biblioteca Central, se pueden conocer los títulos de la colección de gastronomía, con el sistema Librunam, y enlazarse con escuelas, facultades, centros e institutos que han publicado temas afines a la cocina mexicana (historia, geografía, biología, química, etcétera). Lo mismo ocurre con las tesis que al respecto se han presentado en la UNAM. Como un homenaje a Javier Taboada, promotor de esta colección, invitamos al público en general a donar materiales sobre cocina mexicana que contribuyan a enriquecer este acervo.
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