Democracia en hora y media

Religen a Luege al frente del PAN-DF

Con 35 votos de 60 consejeros, se impuso a sus contrincantes Carlos Gelista y Tayde González

BERTHA TERESA RAMIREZ

Tras poco más de una hora de sesión a puerta cerrada y lejos de la prensa, a la que no le fue permitido seguir el proceso electoral interno para elegir al presidente del PAN en el Distrito Federal para el periodo 2002-2005, José Luis Luege Tamargo fue relecto con 35 votos, en la primera ronda de votaciones, imponiéndose a sus contrincantes Carlos Gelista González y Tayde González Cuadros.

En un proceso que al final fue terso y más rápido de lo que se esperaba, pues en apenas hora y media hubo humo blanco, Luege consiguió la victoria sin problemas. Como ya se esperaba, la mayoría de los consejeros había aceptado apoyar su relección, luego de un proceso para atraer votos a su propuesta. Con el triunfo de Luege Tamargo se mantiene la línea del partido para enfrentar las elecciones de 2003.

Su más cercano oponente, Carlos Gelista, se quedó por tercera ocasión en el camino al obtener 16 votos, menos de los que había conseguido durante su campaña, en tanto que Tayde González Cuadros obtuvo nueve sufragios. Es de mencionar que de los 62 miembros del consejo, 60 votaron, ya que Luege Tamargo no lo podía hacer y uno no asistió.

En su primera conferencia de prensa recién relecto, Luege Tamargo afirmó que 65 por ciento del comité directivo regional fue renovado, y señaló que por mandato de éste tendrá que insistir en la línea crítica frente al Gobierno del Distrito Federal, pero de forma constructiva. "El mandato es muy claro en el sentido de ser un partido fiscalizador del gobierno en todo aquello que se aparte de la ley, pero (debe) ser más bien un partido constructivo, que apoye (al gobierno) cuando sus acciones son de beneficio social".

Reconoció que hay una cuestión de comunicación que es necesario resolver, ya que "se nos percibe a lo mejor una beligerancia en la discusión de ciertos temas (...) aspiramos a una relación institucional con nuestra representación en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal".

Dijo que las fallas del gobierno federal afectan directamente al partido, de tal manera que "tendremos que trabajar de manera conjunta apoyando al Presidente de la República y al gobierno federal".

Tal como lo anticipaba la corriente neopanista, impulsora de la relección de Luege Tamargo, los miembros del consejo regional, integrado en su mayoría por jóvenes y en el cual por primera vez 23 de sus 62 miembros son mujeres, no hubo sorpresas. De hecho, el respaldo para Luege Tamargo se perfiló desde diciembre de 2000, cuando el neopanismo maniobró durante la elección de los 62 miembros del consejo regional y logró deshacer el quórum que se requería para llevar a cabo la elección, lo que provocó la indignación y una reacción virulenta de la militancia.

Luego del incidente, tras un nuevo proceso para elegir a los miembros del consejo regional, quedaron excluidos todos los representantes notables de los grupos de José Luis Luege, Gonzalo Altamirano Dimas y Jorge Galván Bochelén, para dar paso a un consejo integrado mayoritariamente por jóvenes de nuevo ingreso al partido, algunos de los cuales fueron llamados a colaborar en el equipo de Luege Tamargo, ante la crítica de sus oponentes, pues así dejaban de ser imparciales.

A prepararse para 2003: Gelista

Ante el consejo regional panista, el candidato perdedor Carlos Gelista González afirmó que ese instituto político necesita una organización que se pueda sostener por sí misma para mantenerse y crecer, "y cuyo futuro no esté a la suerte o habilidad de una persona, y que por lo mismo no dependa de si el peso se sostiene o se devalúa, o si se aprueba la reforma eléctrica o la fiscal. Es injusto apostar a que el Presidente de la República y su gobierno vayan solos a sostener la transición democrática".

Señaló que ante las elecciones de 2003, el panismo requiere de inmediato la acción para enfrentar ese "enorme reto", que se presenta bajo circunstancias complicadas; "requerimos de procesos internos transparentes, que deriven en la unidad y en una mayor fortaleza interna del partido", puntualizó.