Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Sábado 22 de junio de 2002
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Sociedad y Justicia

La agrupación calcula que cada año se generan 8 millones de toneladas

Demanda Greenpeace que se prohíba en el país la incineración de residuos peligrosos

Emprendió una campaña informativa sobre el tema; recolecta firmas contra la práctica

CAROLINA GOMEZ MENA

En México se generan 3 millones de toneladas de residuos peligrosos al año, de acuerdo con reportes, aunque la cifra real puede ser de 8 millones, pues sólo se tiene el registro de 27 por ciento de las empresas emisoras de esas sustancias, dice Greenpeace.

Del total de desechos generados en el país, alrededor de 85 por ciento son sólidos urbanos, 5 por ciento son peligrosos-químicos-radiactivos y 10 por ciento son infecciosos. Pese a que cada uno debe tener un tratamiento diferente, 80 por ciento son incinerados, con lo cual se producen contaminantes cancerígenos, mutagénicos y bioacumulables.

Con el propósito de que en este país se emita una ley que prohíba la incineración de residuos, Greenpeace México emprendió, en el contexto de la clausura de la Semana Internacional de Lucha contra la Incineración -apoyada por 55 países y 126 organizaciones- una campaña informativa sobre el tema, así como la recolección de firmas en favor de la aprobación de un marco legal adecuado, informó Mariana Boy Tamborrel, coordinadora de la campaña de tóxicos del organismo.

En entrevista, detalló que existen aquí 59 incineradores (la mayor parte en el estado de México y Morelos), de los cuales se estima que casi la mitad "funciona en pésimas condiciones, ya que muchos tienen fugas".

Aunque los incineradores estuvieran en óptimas condiciones, su uso es considerado "tecnología sucia", por lo cual en otros países se ha prohibido la quema de los residuos y se ha optado por técnicas de autoclave y microondas.

Con la intención de que la ciudadanía participe en la toma de decisiones ambientales de manera informada, la agrupación emprendió la campaña de recolección de firmas, las cuales serán llevadas al Congreso en tres meses, cuando empiece el periodo ordinario de sesiones. Con ello se busca que los legisladores aceleren la aprobación de las iniciativas respectivas.

Mariana Boy agregó que la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad una iniciativa de ley en ese sentido, pero el Senado no lo ha hecho. Asimismo, se solicitará a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) que genere una iniciativa prohibitiva, porque "todas las propuestas con que cuentan no exigen la restricción a la incineración".

Desde hace "20 años" se lucha en el mundo contra la incineración porque los contaminantes que produce generan cáncer, particularmente cuando los productos quemados contienen PVC, debido a que su degradación por calor libera sustancias cloradas, abundó.

Así, "mientras en Europa la tendencia es disminuir el número de incineradores (en siete años la reducción fue de 25 por ciento), aquí, en el paraíso para contaminar, hay funcionarios que parece que no saben los daños que la actividad genera en la salud, y hay dependencias que apoyan esta tecnología, como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, que está elaborando una norma oficial mexicana (NOM) que establece reglas de operación para los incineradores, cuando lo que debería hacer es trabajar en prohibir esa práctica", añadió.

Desde hace tres meses Greenpeace México envió a la dependencia "una propuesta para que se establezca, como parte de la NOM, un calendario de erradicación paulatina de los incineradores. El término legal para contestarnos era de 20 días, y estamos en junio y nada", lamentó.

En la agrupación casi existela certeza de que "no se quiere hacer nada, porque eso podría frenar algunas inversiones extranjeras". Y es que "si seguimos siendo el paraíso para contaminar, muchas empresarios, que tienen prohibidas ciertas prácticas en su naciones de origen, optan por trasladarse a los países en donde no hay restricción; sabemos que hay algunas empresas extranjeras queriendo instalar incineradores en el país".

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