ONG responsabilizan al gobierno de Patricio Martínez

Destruyen cruz erguida en 2001 en memoria de las muertas de Juárez

MIROSLAVA BREACH VELDUCEA CORRESPONSAL

Chihuahua, Chih., 21 de junio. De manera furtiva, trabajadores del gobierno del estado destruyeron la cruz monumental erguida el año pasado en la Plaza Hidalgo, frente a la puerta principal del palacio de gobierno, en memoria de las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez, denunciaron organizaciones no gubernamentales (ONG), las cuales responsabilizaron del hecho al gobernador Patricio Martínez García.

Irma Campos, dirigente del grupo feminista 8 de Marzo, dijo que la destrucción del monumento, creado con gruesos durmientes de ferrocarril y en cuyo alrededor fueron soldados más 268 clavos, representando a cada una de las víctimas de la violencia contra las mujeres juarenses, fue una reacción del gobierno estatal a la manifestación que realizaron el miércoles pasado, durante un acto público en el que el mandatario dio inicio a las obras de construcción de una gran macroplaza en el corazón de la ciudad de Chihuahua, y donde algunas de ellas fueron reprimidas por el cuerpo de seguridad de Patricio Martínez.

Durante una manifestación que realizaron este mediodía en el lugar que ocupó el monumento a las víctimas de los homicidios seriales, las organizaciones de mujeres participantes en la campaña permanente "Ni una Más", advirtieron que no se dejarán amedrentar por estas acciones represivas ordenadas por el gobernador, "quien monta en cólera cada vez que se le recuerda su promesa incumplida de campaña de terminar con los crímenes".

Adelantó que en las próximas semanas colocarán una nueva cruz en el mismo lugar, pero de mayor dimensión respecto a la que les fue retirada de la Plaza Hidalgo esta madrugada; "y será más grande cada vez que pretendan borrar ese símbolo que representa el horror, la violencia y la impunidad de los asesinatos de mujeres".

Apenas el miércoles pasado, las organizaciones femeninas habían agregado un clavo a la cruz, en memoria de Paloma Angélica Ledesma, raptada y asesinada en marzo en esta capital, cuyos padres mantienen una lucha permanente con la Procuraduría de Justicia estatal para obtener información sobre el avance de las investigaciones, luego de que descubrieron que agentes de la Policía Judicial del Estado sembraron pruebas en el lugar donde fue encontrado el cadáver para inculpar al novio de su hija.

Por su parte, el secretario general de Gobierno, Sergio Martínez Garza, deslindó a la administración estatal de cualquier responsabilidad en el retiro y la destrucción del monumento, pero se negó a proporcionar el video del monitoreo permanente que realizan sobre la Plaza Hidalgo y el exterior de palacio de gobierno, solicitado por las organizaciones femeninas para identificar a las personas que participaron en la acción.