Se ha mantenido al margen del caso de presunto agiotismo de una institución

Niega presidente de la JAP vínculos con García Lizama

RICARDO OLAYO GUADARRAMA

La falta de intervención de la Junta de Asistencia Privada (JAP) en el caso de un crédito otorgado por el ex presidente de ese organismo, Víctor García Lizama, tiene sustento en la ley, a pesar de las quejas de la familia Aguilar, que cuestiona la decisión y el interés del propio García Lizama por apoderarse de una casa con valor de 10 millones de pesos a partir de un adeudo ya saldado de 500 mil pesos.

El titular de la Junta, Juan Francisco Millán Soberanes, explicó que la disputa se encuentra en un juzgado y en tal circunstancia tampoco se ha generado un acercamiento entre las partes.

En entrevista dijo que en los años 2000 y 2001 la JAP entregó la información requerida al juez civil que resolverá sobre el litigio y estableció que en este momento el problema se da entre dos particulares, por un lado la familia Aguilar y del otro García Lizama y su hijo, Fernando García Ruiz, patrono presidente de la fundación Jesús García Figueroa, institución de asistencia privada, que otorgó el préstamo.

"No es que la Junta no quiera participar, no puede hacerlo", dijo en referencia a los límites en la aplicación de la ley. En todo caso, cuando se dicte sentencia se podrá intervenir, precisó Millán.

Además, rechazó la vinculación directa con García Lizama, como uno de los motivos para no intervenir en el asunto. Aseguró que llegó a la presidencia de la Junta de Asistencia Privada hace más de tres meses sin el apoyo del personaje, porque lo propusieron instituciones que no son parte de la oposición al gobierno y que no interpusieron amparos.

Sobre el diferendo entre la familia Aguilar y García Lizama, dijo que uno de los objetivos es lograr la cordialidad en el trabajo de las instituciones y que no se afecten los servicios que prestan.

En un oficio, la Secretaría de Finanzas del Distrito Federal, en su calidad de integrante del Consejo Directivo de la JAP, cita un escrito de la familia Aguilar, que alerta sobre un acto ilícito de parte de García Lizama. Agrega que se puede presentar una violación a la Ley de Instituciones de Asistencia Privada, de la que es vigilante la JAP.

El texto indica al titular de la Junta que el asunto es de su competencia, pues se trata de un préstamo entregado por una institución de asistencia privada cuyo patrono presidente es el hijo del propio García Lizama.

Por lo pronto el tema se dirime en el juzgado 27 en materia civil, donde hace unos días la fundación recibió una resolución contraria a su intento por apoderarse de la casa de la familia Aguilar, pues no se realizó el remate de la propiedad

El juez Gilberto Ruiz apercibió a la institución para presentar las estimaciones del interés crediticio que considera se le adeuda, las cuales fueron entregadas la semana pasada.

De acuerdo con la familia Aguilar, las estimaciones demostrarán el agiotismo en el préstamo, pues del monto original de 1996 de 500 mil pesos la fundación quiere cinco veces lo prestado, es decir, más de 2 millones 500 mil pesos. Pero el préstamo y los interese generados de 187 mil pesos ya fueron saldados.