Medida para evitar compra de favores de candidatos

Debe regularse el manejo de recursos para campañas, dice López Obrador

ELIA BALTAZAR

Es necesario regular el manejo de los recursos para las campañas políticas y de esa manera controlar su origen y manejo, expresó ayer el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador.

Al expresar su opinión sobre el financiamiento de las campañas políticas, el jefe de Gobierno señaló que se deben investigar por igual los recursos que se desviaron de Petróleos Mexicanos para el PRI y aquellos que provinieron de los Amigos de Fox. "Se tiene que ir al fondo en todo", dijo.

Si bien reconoció que es indudable que el presidente Vicente Fox ganó con votos y que su triunfo fue legítimo, también aseveró que "en todas las campañas se dieron recursos que deben aclararse en cuanto a su procedencia". Sin embargo, dijo, no tiene sentido volver sobre el tema, como ocurre antes de cada elección, si no se va a corregir.

Expresó que es necesario reducir el monto de recursos destinados a las campañas y transparentar su origen, para evitar que se compren los favores del candidato.

Sucede, dijo, "que lo compran y luego llega atado, ya no para servir a la gente, sino para ponerse al servicio de unos cuantos que le ayudaron en su campaña. Eso es lo que debe evitarse".

López Obrador señaló que sería oportuno que ahora se investiguen los gastos de campaña de 2000; "que se vaya a fondo y se castigue a quienes violaron la ley". Pero si no hay castigo, advirtió, si no se atienden las demandas que están en el Instituto Federal Electoral, nadie lo va a tomar en serio.

Al respecto, incluso cuestionó la actitud asumida por el IFE, especialmente en 1994, cuando se presentaron pruebas sobre los recursos que el ex banquero Carlos Cabal Peniche había aportado a la campaña del priísta Roberto Madrazo en Tabasco. "Se presentaron las quejas y la comisión encargada de este asunto la desechó, pero a los 15 días el mismo Cabal admitió que había aportado el dinero".

Por lo anterior, manifestó reservas en la confianza hacia el IFE, particularmente en las comisiones que trabajan en la investigación de quejas. "Ojalá ya hayan cambiado, porque ya tienen en sus manos otro asunto, pero si en este caso no hay castigo, entonces todo va a ser una tomadura de pelo y una simulación", advirtió.