La frustración invade a las dos selecciones
Portugal y Polonia necesitan triunfar para evitar su
salida
REUTERS, DPA Y AFP
Seul,
8 de junio. Portugal y Polonia se jugarán la vida el lunes,
en un partido en el que ambas escuadras necesitan desesperadamente el triunfo
para evitar su salida temprana de la Copa del Mundo.
La frustración por ambos bandos es suprema. El
estratega polaco, Jerzy Engel, ya abandonó la idea de llegar a salir
primeros del grupo, y se conforma con "ser segundos, pero para lograrlo
tenemos que luchar como nunca''.
El equipo polaco, que participa en un Mundial por primera
vez desde 1986 y perdió en su debut surcoreano contra los locales
(2-0) dentro del grupo D, llevó a fuertes debates internos en los
que se metió incluso el presidente de la federación, recomendando
al volante Marek Kozminski, una de las figuras, que colgara los botines
ante tan mal partido que había hecho.
En la concentración portuguesa, el ánimo
está por los suelos tras la derrota por 3-2 con Estados Unidos.
"No nos sirve para nada lamentar lo mal que jugamos'', pero "pesa mucho
el hecho de que el que pierda se va a ir a casa'', recalcó el volante
del Milán italiano, Manuel Rui Costa, mientras que el defensa Jorge
Andrade, del Oporto, dijo que después de ese partido, todos quieren
jugar bien para "corregir la mala imagen que hemos dejado'', y Luis Figo
opinó que si no fuera optimista "habría hecho las maletas
ya''.
Por otra parte, ha surgido una controversia sobre la designación
del árbitro escocés Hugh Dallas, a quien los lusitanos rechazan
por haberse mostrado parcial en la semifinal de la Eurocopa contra Francia.