El CNCA promete garantizar la cohesión
del programa
Prioridad en el encuentro yoreme la enseñanza
de la lengua a los indígenas
RENATO RAVELO ENVIADO
Culiacan, Sinaloa. Es prioritario elaborar un instrumento
que nos permita la enseñanza de la lengua a la población
indígena, opinó Bernardo Esquer, organizador del Cuarto Encuentro
Yoreme, durante la realización de la mesa sobre la problemática
de la cultura de los habitantes originales de la región.
En
la misma Eudoro Fonseca, titular de la oficina encargada de la ciudadanización
del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, manifestó que
la oficina a su cargo ofrece todos los elementos para "garantizar la cohesión,
que debe ser el objetivo del programa" regional de cultura Yoreme que abarca
los estados de Chihuahua, Sinaloa y Sonora.
En su ponencia titulada La lengua como rasgo identitario
en la educación indígena, Esquer señaló que
asimismo hace falta la "elaboración de otro método de enseñanza
de la lengua a la población mestiza; esto último tendría
su aplicación en las universidades que lleven carreras afines a
la educación indígena".
El organizador por parte de los Yoremes -de parte del
gobierno federal participa Difocur a cargo de Ronaldo González-,
destacó que "el renglón que merece una atención más
oportuna, es el de la estandarización de la lengua y la elaboración
de un instrumento adecuado y unificado de las formaciones gramaticales
de cada estado con variantes dialectales".
Alejandro Aguilar Zeleny, del centro INAH Sonora, luego
de señalar que es la vida ceremonial la que en la actualidad determina
"la permanencia y fortaleza de la cultura yorem'me mayo", a pesar de que
debido a la cultura paternalista del estado se les vio como "algo reducido,
disminuido" como al resto de las culturas indígenas a las que se
vio durante muchos años "incapaces tanto de desaparecer como de
desarrollarse".
Para el investigador del INAH esta "visión paternalista
que el estado se encargó de desarrollar por varios sexenios... buscaba
fundar el espíritu nacional a costa de la diversidad étnica
y cultural que es temida y mal comprendida".
Alfredo Quinteros Urías, investigador de San Miguel
Zapotitlán, además de coordinador de la comisión internacional
del congreso permanente de la etnia definió: "la palabra Yolém'me,
se forma del verbo yóole, que en yoreme (dicho a la manera del español),
es el verbo nacer, yolém'me: el que ha nacido".
Su exposición minuciosa señaló las
diferencias entre las distintas denominaciones, los momentos en que han
sido reconocidos: "fue un resolutivo del Primer Congreso Interétnico
de Derechos Humanos de noviembre y diciembre de 1992, en San Miguel Zapotitlán,
promover el nombre correcto de los indígenas de la región".
Entre los participantes del encuentro el sentido de esta
declaración, casi de manera unánime, quedó consensada,
ya que es de épocas recientes, en los que el sentido del "nacionalismo
revolucionario" ha sido cuestionado por la academia y los hechos, que el
asunto indígena adquiere un sentido no unificador sino que reconoce
la diversidad, no solamente cultural sino de formas de organización
y gobierno.