El cantante venezolano presentó su nuevo
cidí: Suma
Más fácil grabar boleros como Luis Miguel
que temas inéditos: Montaner
ARTURO CRUZ BARCENAS
Con Suma, su nuevo disco, el cantautor venezolano
Ricardo Montaner plantea su propuesta sobre el bolero, "dedicado a los
mexicanos", dijo, género musical que entiende ya no de acuerdo con
el estereotipo alimentado por el cine de los años 40 y 50 del siglo
pasado, de la pantalla de blanco y negro, con el humo de los cigarrillos,
de historias de mujeres fatales, "sino según la manera de llorar
de ahora.
"Implica
-el bolero de hoy- menos amargos; es un disco positivo, con canciones de
amor positivas, producto de los afectos, del enamoramiento", expresó
en rueda de prensa celebrada el pasado martes. La producción estuvo
a cargo de Bebu Silvetti, con quien Montaner ya ha trabajado.
Las letras de los 10 temas fueron escritas por Montaner;
la música de Lloras y Respirando la luna estuvo a
su cargo. La musicalización de Si tuviera que elegir, Urgente,
La ida y Suma fue de Marco Flores. Durante la conferencia, su
disquera, Warner Music, le entregó un disco de oro por más
de 75 mil copias vendidas de su cd Sueño repetido, anterior
a Suma.
En 2001, el cantante se presentó en 27 sitios de
México, donde ofreció 70 conciertos. "Eso no sucede ya con
ningún otro artista. Eso se debe a muchas razones; la principal
es la crisis que se refleja en la industria del entretenimiento. La gente
prefiere, primero, tener su nevera llena de comida, antes de pensar en
comprar un disco.
"Este disco es deliberadamente hecho para México;
lo anuncié hace años e iba estar bajo la dirección
del maestro Armando Manzanero, pero no lo pudimos concretar por razones
de tiempo. Es un sueño postergado. Soy bolerista de crianza. A partir
de Bésame -tema de su anterior cd- surgió formalmente
la idea de hacer un disco de boleros, pero ciento por ciento inéditos,
míos", precisó.
Añadió que el género que ahora presenta
creció en México. "La cultura contemporánea mexicana
en los 50 o 60 años pasados ha venido acompañada del bolero.
Este es un disco conceptual, pero no implica un cambio en mi línea
de la balada. No hay un gran cambio. Sí despierta toda esta bulla
de romanticismo que uno trae por dentro... es un disco lleno de poesía
por todos lados".
--¿Se puede revitalizar el género del bolero,
como se dice que lo hizo Luis Miguel?
--Sí, pero en mi caso no es con canciones editadas,
pues yo compongo. Eso no quiere decir que tenga más éxito
que un disco con temas editados. Eso está por verse. Bajo todo punto
de vista es más fácil apelar al recuerdo, a lo que ya está
probado; lo más sencillo es agarrar un tema que fue éxito
y hacerle un arreglo, más la voz, pues... Escribir canciones y arreglarlas
por primera vez es más difícil. Cantar El día que
me quieras, de Gardel, con un nuevo arreglo, es más fácil.
Este disco, agregó, contradice lo dicho por él
mismo. "Un día dije que yo jamás iba a grabar un disco de
boleros; fue cuando Luis Miguel grabó el suyo. Era, para mí,
como usurpar un espacio que ya había ganado él. Lo que pasa
es que Dios nos prepara estas emboscadas".
-¿Qué atributos debe tener un bolero hoy;
el México que lo impulsó ya no existe?
-Tienes razón. La cantina, el blanco y negro, el
humo... por ellas aunque mal paguen... ha variado. Hay otras maneras de
llorar los amores. Para mí, un disco de boleros implica menos amargos.
Este es un disco totalmente positivo, con canciones de amor positivas.
Son boleros producto de los afectos, del enamoramiento.