En sus terrenos crearían una fábrica de licor y un centro turístico: afectados

Influyentes priístas de Yucatán intentan despojar de sus propiedades a albergue para enfermos de sida

LUIS BOFFIL CORRESPONSAL

Merida, Yuc., 25 de mayo. El albergue Oasis de San Juan de Dios, que protege y brinda ayuda médica a los enfermos de sida en Yucatán, recurrió a los gobiernos federal y estatal para defenderse de un litigio que desde hace cinco años amenaza con despojarlos de sus propiedades y demás bienes materiales.

El conflicto tiene un trasfondo político y económico donde estarían involucrados influyentes militantes del PRI para crear, en los terrenos del albergue, una fábrica de licor, un fraccionamiento y un complejo turístico.

Carlos Méndez Benavides, director de la agrupación civil, explicó que el problema data de 1997 cuando inició el proyecto en el municipio de Conkal, ubicado a 15 kilómetros al norte de Mérida, y un grupo de campesinos demandó a los nuevos inquilinos por apropiarse, presuntamente, de tierras ejidales sin mediar permiso o pago de por medio.

El ejido Xcuyún, de Conkal, acudió al tribunal agrario para documentar el conflicto, a lo que esa instancia legal dio entrada y posteriormente concedió la razón a los demandantes.

Oasis de San Juan de Dios llevó el caso al juzgado sexto civil y consiguió un amparo para evitar el inminente desalojo que habría dejado desamparadas a 25 personas que reciben tratamiento contra el sida en el albergue.

De igual forma, se hubieran perdido las tres hectáreas donde el albergue ya edificó 600 metros cuadrados de mampostería y hay 30 módulos prefabricados, donados por organismos no gubernamentales, gobierno y empresarios holandeses hace tres meses.

Empero, la situación es más de fondo. Los terrenos donde se ubica Oasis obstaculizarían proyectos económicos donde hay intereses de conocidos políticos locales, la mayoría de militancia priísta.

En los círculos políticos estatales se informa que en los terrenos del albergue se planeaba construir un fábrica de licor elaborado con cogollos del henequén. En este plan estaría involucrada la familia Argáez, propietaria de una destilería en Conkal. Una de las dueñas de esta factoría es Mimisol Argáez de Sobrino, esposa del ex senador, ex diputado federal y ex líder del Movimiento Territorial del PRI, Carlos Sobrino Sierra.

Aledaño a la propiedad se construiría un fraccionamiento y a mil 700 metros de Oasis un complejo turístico ecológico con restaurantes y recorridos por ex haciendas henequeneras que datan de los siglos XVIII y XIX. El proyecto turístico lo encabeza, según las fuentes consultadas, el director del penal meridano, Francisco Brito Herrera, único funcionario del gobierno de extracción panista que laboró en el sexenio de Víctor Cervera Pacheco.

Brito Herrera también enfrenta un litigio con Oasis de San Juan de Dios por despojarlo de un terreno, en 1997, que está ubicado a un costado de su hacienda, en el ejido San Diego Kutz, de Conkal. Hasta el momento, el juicio se dirime en el Ministerio Público del fuero común. Brito es cuñado del legislador federal priísta Carlos Berlín Montero, dirigente estatal de la CNC y colaborador en el régimen cerverista.

Méndez Benavides reiteró que ante la problemática el albergue acudió a los gobierno federal y estatal para pedir que expropien el terreno en su favor y se acabe el conflicto. A cambio, pagaría a los ejidatarios una cantidad simbólica equivalente a una hectárea.

Dijo que el juicio marcha favorablemente y confió en que las autoridades impidan el despojo para beneficiar los intereses económicos de unos cuantos políticos.