Era trasladado a una agencia del MP por disparar dentro de un hotel

Muere militar a bordo de una pánel de la SSP

Se desconocen las causas del deceso Ordena la dependencia la detención de policías

SUSANA GONZALEZ G.

Un oficial de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) murió ayer por la mañana dentro de una panel de la policía capitalina cuando era trasladado a una agencia federal del Ministerio Público en la delegación Azcapotzalco, luego de haber sido detenido en un hotel, cuando a tiros trataba de hacer salir a una pareja de una habitación.

Hasta anoche se desconocían las causas del deceso de José Gabriel Martínez Romero, quien está acreditado como mayor intendente, según la credencial 124093 expedida por la Sedena. En tanto, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) dispuso que los policías preventivos involucrados en la aprehensión del militar fueron detenidos para deslindar responsabilidades. La identidad del militar fue corroborada además por otras tres credenciales que encontró la policía en su ropa: una licencia expedida por el gobierno del estado de México, su credencial de elector y una tarjeta de débito de Bancomer.

De acuerdo con sus primeras declaraciones, los uniformados Aurelio Ruiz Alemán y Ricardo Hernández Segundo, responsables de la pánel G0-946, en la que fue trasladado el militar, se percataron de que éste había perdido el conocimiento hasta que llegaron a la agencia especializada de la Procuraduría General de la República localizada en Norte 55 y Poniente 44, cerca de calzada Camarones.

Martínez Romero -quien vestía de civil con una playera de algodón verde olivo, pantalón de mezclilla y botas negras- se hallaba tendido en el piso de la pánel y ahí fue examinado por socorristas y paramédicos de la ambulancia 6 de la Cruz Roja, quienes constataron su muerte y, extraoficialmente, la atribuyeron a un paro cardiaco o un derrame cerebral.

Trascendió que los uniformados involucrados habrían asegurado en sus primeras declaraciones que una vez que Martínez Romero fue despojado de su arma de cargo y se le subió a la pánel, ingirió algo que no alcanzaron a ver y que guardaba en una de las bolsas de su pantalón, y enseguida expulsó espuma por la boca, versión que será verificada con la necropsia y los análisis periciales que efectúen las autoridades.

La detención del militar ocurrió alrededor de las diez y media de la mañana, a partir de que Víctor Montalvo Gómez, jefe de seguridad del Hotel Amazonas, localizado sobre la avenida San Antonio Abad 171, colonia Obrera, llamó a la policía para reportar que un sujeto efectuaba disparos en unos de los pasillos del inmueble.

Al lugar fueron enviados cuatro patrulleros en las unidades 2440 y 2450 de la Coordinación Territorial Cuauhtémoc-8, así como los dos policías responsables de la Suburban o pánel G-946, quienes lograron despojar al militar de su arma de cargo -una pistola calibre 45 con registro 70B04220 de Sedena- y meterlo inicialmente dentro de una de las patrullas.

El militar había accionado su arma varias veces afuera de una de las habitaciones del hotel, al tiempo que gritaba "sal, maldita, porque te voy a matar", ya que al parecer pensó que su esposa se encontraba ahí.

Sin embargo, como Martínez Romero -quien lucía desaliñado, ya que estaba sin rasurar y tenía la playera y las manos sucias- pretendió romper los cristales del auto patrulla, los uniformados prefirieron meterlo en la pánel.

De la colonia Obrera, los policías partieron a la cuarta agencia del MP local, donde los funcionarios responsables del lugar se negaron a atender el caso, al argumentar que puesto que al detenido le fue asegurada una arma de uso exclusivo del Ejército Mexicano, debería ser llevado a la agencia especializada de la Procuraduría General de la República. A las 11:30 la pánel arriba al MP federal en Azcapotzalco, es decir, una hora después de que el militar fue detenido, pero para entonces Martínez Romero ya estaba muerto.