Afirma que "altas estructuras del poder" alientan la formación de grupos paramilitares
Presentará la CCIODH al Parlamento Europeo informe sobre violaciones a derechos en Chiapas
Crecen patrullajes y retenes del Ejército; sin resolverse, el conflicto de los desplazados
Sólo aprobando la ley Cocopa se darán las condiciones para reanudar el diálogo de paz
La Comisión Civil Internacional de Observación por los Derechos Humanos (CCIODH) presentará hoy en el Parlamento Europeo un informe sobre la situación de las garantías en Chiapas, en el que aborda temas como el origen de los grupos paramilitares, los sobrevuelos y patrullajes castrenses en las comunidades indígenas y la reforma constitucional en la materia "que no satisface a las etnias".
Una copia del informe, con recomendaciones y conclusiones, le será entregada al presidente Vicente Fox Quesada el miércoles 15, cuando asista al Parlamento Europeo, donde tendrá una intervención, en el marco de su gira de trabajo por el viejo continente.
Dicha comisión -integrada por miembros de 14 países europeos- estuvo de visita en el país del 16 de febrero al 3 de marzo pasado. Visitó Chiapas y Querétaro y se entrevistó con funcionarios de la Secretaría de Gobernación, Procuraduría General de la República (PGR), cancillería y Suprema Corte de Justicia de la Nación, entre otras instancias.
En Chiapas se entrevistaron con miembros de la sociedad civil, indígenas zapatistas, desplazados, grupos identificados como paramilitares y autoridades. Como resultado de su visita, hoy presentarán un informe de la situación de los derechos humanos en esa entidad y, en particular, en las comunidades indígenas.
La CCIODH destaca que la aprobación de la reforma constitucional en materia indígena "no ha dado satisfacción a los pueblos indios, que no ven reflejadas en ésta la esencia de los acuerdos de San Andrés, al no reconocer a las comunidades como entidades de derecho público. Tampoco reconoce a los pueblos como sujetos de ley ni depositarios políticos de los derechos de libre determinación y autonomía".
Subraya la comisión que la iniciativa de la Cocopa "es la única" que puede restablecer las condiciones mínimas para el diálogo de paz, cuya ruptura ha significado enormes sacrificios para los pueblos indios, no sólo de la zona de conflicto, sino también de todas las regiones en las que hay presencia indígena.
Durante su visita a las poblaciones indígenas de Chiapas, la CCIODH constató que los sobrevuelos de los militares "siguen sembrando zozobra en las comunidades". Además, apuntan, los patrullajes y retenes del Ejército Mexicano se han incrementado paulatinamente, y ya se ha hecho costumbre que los soldados improvisen puestos de control en los alrededores de las poblaciones para acosar e intimidar a los indígenas, sometiéndolos a interrogatorios e impidiendo el libre tránsito.
El origen de los grupos paramilitares
La CCIODH cita en su informe que el origen de los grupos paramilitares está dentro de un esquema de contrainsurgencia que se enmascara en agresiones por problemas de tierras, confrontaciones partidarias, conflictos religiosos, enemistades personales, venganzas familiares o simplemente accidentes, ocultando de este modo la estrategia paramilitar de control, desestabilización, faccionalización y represión selectiva, como parte de una guerra "diseñada y dirigida desde las más altas estructuras del poder".
Agrega: "Lejos de contener a los grupos paramilitares como Paz y Justicia, cuyos dirigentes han sido liberados inexplicablemente, éstos siguen generando múltiples conflictos, cerrando caminos, aplicando una política de terror, asesinatos y agresiones constantes contra las comunidades zapatistas, apoyados, como siempre, por las viejas estructuras municipal y comunal priístas, y gozando de la complicidad, por omisión y comisión, del Ejército y los cuerpos de seguridad de diversas dependencias gubernamentales".
Sostiene la CCIODH que el problema de los desplazados sigue sin resolverse. Los despojos y asesinatos que arrojaron al exilio a miles de choles y tzotziles, en su mayoría bases de apoyo del EZLN, se mantienen impunes. "Hasta ahora el problema de los desplazados no ha sido atendido en su verdadera dimensión. Los gobiernos federal y del estado impulsan retornos de desplazados en condiciones de inseguridad."