Londres, 12 de mayo. La sonrisa desfigurada por la esclerosis lateral amiotrópica que padeció en vida Diane Pretty, de 43 años, fue un símbolo de esperanza para muchos británicos que padecen enfermedades musculares degenerativas.
Sin embargo, Pretty, esposa y madre de dos niños, pareció rendirse tras su fracaso ante la Corte Europea de Derechos Humanos, a la cual solicitó el derecho a la eutanasia activa. Muchas personas que sufren la misma enfermedad enviaron cartas y mensajes por correo electrónico a la BBC de Londres, relatando que ellos tampoco deseaban seguir viviendo.
"Diane es finalmente libre", dijo su esposo Brian esta noche sobre la muerte. Pocos días después de conocerse el fallo de la corte de Estrasburgo, Diane comenzó a tener graves dificultades para respirar. "Tuvo que atravesar lo que siempre temió, y no pude hacer nada para ayudarla", declaró el cónyuge.
Una tortuosa asfixia fue la causante de la muerte de Diane en un hospicio cercano a Luton, donde vivía, en el condado de Bedfordshire. "El personal fue maravilloso, pero le resultó difícil hacer algo para paliar el sufrimiento de Diane", agregó.
Brian, empleado de correos, renunció a su puesto para poder pasar día y noche junto a su esposa. Cuatro meses después de conocerse el diagnóstico, en noviembre de 1999, Diane ya se encontraba en una silla de ruedas.
Diane, que sólo podía expresarse por medio de una computadora, tenía que ser alimentada, bañada y trasladada por terceros. No había nada que deseara más que Brian pudiera liberarla de su sufrimiento sin ser penalizado.
"La ley me ha quitado todos mis derechos", aseguró Pretty tras conocer la noticia en Londres. Sus abogados señalaron que la Corte se había perdido una oportunidad de arreglar un error de la legislación.
Luego de la sentencia del tribunal, Pretty quiso organizar una gran campaña de recolección de firmas con el propósito de presionar al gobierno para que introduzca cambios en la legislación.
Diane Pretty padecía esclerosis y estaba desahuciada; "ya es libre", dijo su esposo
Londres, 12 de mayo. La sonrisa desfigurada por la esclerosis lateral amiotrópica que padeció en vida Diane Pretty, de 43 años, fue un símbolo de esperanza para muchos británicos que padecen enfermedades musculares degenerativas.