Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Lunes 13 de mayo de 2002
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Política
CONGRESO DEL PRD

Aprueban reformas estatutarias y la línea política para fortalecer vínculos con la sociedad

Ganar mayoría en los comicios de 2003, capital contra el presidencialismo "irresponsable" de Fox

Crean comisión de legalidad para resolver los diferendos derivados de las elecciones internas

ROSA ELVIRA VARGAS, RENATO DAVALOS Y CIRO PEREZ SILVA

La exasperación y las recriminaciones llegaron en el epílogo del congreso perredista, cuando se decidía la responsabilidad de Samuel del Villar como titular de la Comisión de Legalidad, que coadyuvará a limpiar el proceso electoral del 17 de marzo. Tuvo que intervenir Cuauhtémoc Cárdenas para hablar de la trayectoria del ex procurador capitalino.

Necesitamos esa comisión, dijo el ex candidato presidencial. Requerimos reparar las fallas e irregularidades de las pasadas elecciones que pusieron al partido al borde de la desaparición, advirtió. Quienes se presenten a la comisión deben hacerlo con rectitud, sin sectarismos, sin parcialidades, sin tomar en cuenta las corrientes a las que puedan pertenecer quienes hayan incurrido en faltas, subrayó.

En su último día de trabajos, los perredistas se enfrascaron en discusiones que llevaron a la aprobación de las últimas reformas estatutarias, a la definición de la línea política y a la elección de los 64 consejeros que restaban para iniciar la sesión del nuevo Consejo Nacional que habría de elegir al Comité Ejecutivo Nacional, así como un buen número de resolutivos especiales referidos a problemas muy concretos que enfrentan grupos sociales en diferentes entidades .

Los presagios de turbulencia que se configuraron en la mañana fueron resueltos durante un encuentro de Rosario Robles con una cuarentena de representantes de siete entidades, que habían amenazado con llevar a la plenaria un documento para pedir la invalidación de "todas las decisiones de la Comisión Nacional de Garantías" sobre el pasado proceso electoral interno.

En esa reunión, Robles ofreció que la Comisión de Legalidad, formalizada por la noche, se abocaría a la resolución de los conflictos poselectorales en muchos estados. Con ello desactivó lo que hubiese constituido un cisma partidista y de paso dejó sin oportunidad de defenderse en tribuna, como era su intención, a Arnoldo Vizcaíno, presidente del Servicio Electoral del partido.

En un informe que preparó para leer en tribuna, Vizcaíno diría que fue profundamente injusto y hasta canallesco políticamente encarar ahora la humillación de la destitución irracional "presuntamente por ser responsables de lo que somos responsables todos".

Nunca hubo condiciones en la asamblea para que el presidente del Servicio Electoral accediera al micrófono. Había demasiados grupos resentidos y, en consecuencia, el documento se quedó para ser utilizado por los medios de comunicación.

En el texto reconoció que el Servicio Electoral cometió errores, pero de paso también responsabilizó a la presidencia saliente por no proporcionarle los recursos económicos para su tarea, lo que le llevó a incumplir, por ejemplo, con la impresión de la paquetería usada en los comicios.

Sin embargo, a los señalamientos de actitudes sospechosas y de afectación de la transparencia respondió que los grupos regionales en varios estados, por intereses locales, tenían "secuestrados" los datos. Argumentó que en esas tareas intervinieron personas afines a las planillas, particularmente las que más votos obtuvieron.

Este día también se confirmó que el PRD que presidirá Rosario Robles deberá encarar un adeudo por alrededor de 130 millones de pesos, y que para muchos tienen dedicatoria específica los señalamientos que ella misma hiciera el sábado de depurar la administración partidista y llegar a fondo en aquellos casos de comprobada corrupción en los últimos tres años.

Por ejemplo, se refiere que se llegará a las acusaciones penales contra los responsables y muchos no salen de su asombro al constatar que algún miembro del comité ejecutivo anterior tenía para su servicio político, con altas percepciones, a 32 delegados estatales; que en ese comité se abusó de los fondos para la adquisición de automóviles, viáticos y boletos de avión sin utilidad política alguna.

Precisamente los congresistas aprobaron ayer la creación de la Secretaría de Finanzas, que junto con la ampliación del número de integrantes del Comité Ejecutivo Nacional, de 17 a 21, a Robles dieron un margen de maniobra que buscó desde hace semanas en negociaciones con las distintas corrientes. Prácticamente el congreso le dio un "cheque en blanco", aseguró uno de los cercanos roblistas.

Además, el congreso aprobó la reforma en torno a la representación indígena en las candidaturas a puestos de elección popular. En los municipios y en los distritos con mayoría indígena los candidatos serán indígenas hablantes. Por cada bloque de diez candidatos a diputados de representación proporcional habrá por lo menos un representante de los pueblos indios.

Después se procedió a la aprobación del documento de línea política, en el que los delegados hacen una severa crítica a la administración foxista porque ha dilapidado el enorme capital político que representó la derrota del PRI, ha demostrado incondicional sometimiento a los intereses estadunidenses, desconoce las leyes y la historia de México y además carece de compromiso social y visión de Estado.

En síntesis, "ha sido una gran decepción para quienes votaron por el cambio". De nuevo, el PRD resaltó la importancia de lograr una importante presencia en la Cámara de Diputados, no sólo porque esto mostrará las posibilidades reales de los partidos políticos para las elecciones presidenciales de 2006, sino porque permitir una cámara controlada por Vicente Fox fortalecería un presidencialismo que sumaría a los vicios del pasado priísta la frivolidad, falta de oficio e irresponsabilidad del actual Presidente.

De ese modo, el perredismo se plantea como tarea determinar los cien distritos uninominales donde pueda triunfar, obtener más de 25 por ciento de la votación o ganar al menos 130 diputaciones. Para ello, apremió a su directiva a reinsertarse en el movimiento social, del cual, admite, en los últimos años se alejó y en algunos casos se contrapuso a él o simplemente lo ignoró.

El PRD no desconoce, en este sentido, que muchos movimientos sociales ven con desconfianza a los partidos, manifiestan expresiones antipartidistas, aunque "es más acusado su alejamiento del PRI y del PAN". En la misma línea, el PRD asume que debe resolver la situación creada por las elecciones del 17 de marzo y pasar a una etapa de reconstrucción desde abajo para tener listo su aparato organizativo de cara a las elecciones de 2003 y diseñar un discurso e imagen únicos de un partido que al mismo tiempo que critica y se opone a los proyectos del PAN y del gobierno, "sabe cómo gobernar de otra manera y ofrece un proyecto alternativo de nación".

La elección de los 64 consejeros arrojó, como muchos prevían por la correlación de fuerzas, que 23 de ellos fueron ganados por el grupo rosarista; 17 por los chuchos, 12 por los amalios, seis por la planilla de Camilo Valenzuela y seis por la del grupo de Héctor Sánchez y Félix Salgado Macedonio.

La compactación de planillas por el proceso electivo, las cuotas partidistas de género y las negociaciones dentro de cada corriente generaron un cúmulo de inconformidades entre militantes de viejo cuño y hasta fundadores del PRD que fueron excluidos.

Hacia el cierre del congreso, un receso más para decidir una propuesta de varios estados que pretendían ser tomados como prioritarios en los trabajos de la Comisión de Legalidad, fue el principio de las recriminaciones entre las cuales concluyó el congreso perredista.

Pablo Gómez propuso la resolución de la presidencia colectiva. La Comisión de Legalidad sería encabezada por Samuel del Villar, Miguel Angel García Domínguez, Rubén Rocha y Teresa Juárez de Castillo.

Jorge Calderón objetó en la tribuna las propuesta de incluir a Samuel del Villar. Lo acompañaron algunos chiflidos y gritos desde el anonimato. Robles se movilizó en su asiento como pretendiendo dirigirse a la tribuna. Pero fue Cuauhtémoc Cárdenas el que se enfiló al templete.

"No puedo dejar pasar el hecho de muchos de los ataques de que ha sido objeto en su vida pública Samuel del Villar. Fue objeto de una campaña de linchamiento contra el Gobierno del Distrito Federal. Se enfrentó a intereses como los de Tv Azteca, a intereses poderosos con rectitud y energía", señaló.

Yolanda Guzmán, de Nezahualcóyotl, impugnó sin mayores argumentaciones a Del Villar. Algunos aplaudieron al ex procurador, la mayoría le silbó. René Bejarano subió a la tribuna en medio de la gritería: "no tienes vergüenza, cínico, barbero, lechero..."

Bejarano defendió a Del Villar. También elogió a Cárdenas Solórzano. El ex procurador no le tiene miedo y es incorruptible, dijo. Descendió entre otra gritería. El congreso había terminado con la aprobación final de la Comisión de Legalidad, que presentará un informe en un plazo hasta de cinco meses y que investigará las irregularidades, incluso las que hubieran cometido el Servicio Electoral y la Comisión de Garantías.

Rosario Robles resumió el sentido del congreso: "En el PRD no le tenemos miedo a la verdad".

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