COPAS DEL MUNDO
Luces de neón y múltiples ofertas sorprenderán
a los visitantes
La industria sexual espera a los fanáticos en
Japón
Se manejan recursos por casi 9 mil 400 millones de dólares,
afirma especialista
DPA
Tokio, 10 de mayo. Quienes viajen a Japón
a presenciar el Mundial se sorprenderán por la gran cantidad de
luces neón rosas y ofertas de prostitutas, pegadas en las cabinas
telefónicas que habrá en los distritos de entretenimiento
de Tokio y Yokohama.
"Hay
muchos negocios de sexo en Japón. El sexo comercial es un aspecto
que perdurará por siempre en el estilo de vida de Japón,
y aquí se acepta cualquier cosa", manifestó Shinya Yamamoto,
quien hizo 250 películas pornográficas en sus 35 años
de carrera.
Según una encuesta gubernamental, más de
10 por ciento de los adultos japoneses utilizan esos servicios y entre
los jóvenes es de aproximadamente 20 por ciento. Este porcentaje
en el sector juvenil es mucho más alto que el promedio en Estados
Unidos o algún país europeo.
"La industria sexual japonesa está centrada en
el masaje y no en las relaciones sexuales. Los jóvenes japoneses
no tienen el coraje o la energía para encontrar novia y prefieren
ir a esos lugares", dijo Yamamoto.
De acuerdo con una encuesta realizada por el fabricante
de condones Durex, los japoneses tienen, en promedio, 36 relaciones por
año, mientras que los estadunidenses tienen una media de 124 relaciones
anuales.
"El volumen de la industria japonesa del sexo está
estimado en al menos 1.2 trillones de yenes (9 mil 400 millones de dólares),
dijo Takashi Kadokura, economista del Dai-Ichi Life Research Institute.
Otros negocios son: clubes y salones que a menudo ofrecen
masajes sexuales e imágenes, que incluyen todo tipo de juegos eróticos.
Debido a la recesión económica, el negocio más barato
se llama deri-heru, que consiste en enviar chicas a casa del cliente.
La mujer presta servicios sexuales, con excepción del coito. El
economista Kadokura estima que hay unas 168 mil 680 chicas involucradas
en ese sistema.
El servicio a domicilio cuesta, en promedio, 78 dólares,
mientras que las sesiones en soapland 390 dólares. De estas
sumas las mujeres se llevan la mitad. La cantidad de soaplands y
de lugares para el striptease se redujo de 16 mil en 1985 a 11 mil
en 2001, desplazados por el deri-heru.