Circulara en breve una edición del clásico
hindú sin las distorsiones de la versión victoriana
Un Kama Sutra más fiel para angloparlantes
Modificará la percepción de que es un
vulgar manual de sexología, afirma la promotora
ARTURO GARCIA HERNANDEZ
Durante más de cien años, lectores en lengua
inglesa -y probablemente en otras lenguas también- han leído
una versión del Kama Sutra plagada de errores, distorsionada
y mutilada. El hecho más grave de esa versión es que minimizó
intencionalmente la importancia que el texto original otorga al desempeño
y placer sexuales de la mujer. De acuerdo con una nota del diario The
New York Times, aparecida el sábado, la traducción al
inglés más difundida, leía y vendida -hecha por el
explorador británico, súbdito de la reina Victoria, sir Richard
Burton, y publicada en 1883- fue hecha sin rigor; está matizada
por la moral victoriana y distorsionada por los prejuicios u obsesiones
particulares de Burton.
Pero
en junio próximo los lectores en lengua inglesa conocerán
una nueva versión del antiguo y célebre manual hindú
del amor erótico, corregida y radicalmente distinta de la hasta
ahora conocida. Un Kama Sutra fiel al original que modificará
profundamente la percepción popular y mayoritaria que hasta ahora
se ha tenido de la obra como un vulgar manual de sexología, en el
mejor de los casos, o como un texto pornográfico.
Wendy Doniger, de 61 años, profesora de historia
de las religiones en la Universidad de Chicago, y Sudhir Kakar, de 63 años,
sicoanalista indio y decano del Centro de Estudios de las Religiones del
Mundo en Harvard, son los autores de la nueva versión, Kamasutra,
que será publicada por la Oxford University Press. Entrevistado
por una reportera del NYT, Kakar sostiene que hasta hoy el Kama
Sutra es el libro indio más conocido en el mundo, pero también
se encuentra entre los libros peor comprendidos de todo el mundo: "Se le
ha tomado como pornografía hindú y la gente lo busca por
las posiciones sexuales". La razón es que la traducción de
Burton refleja los pruritos victorianos en materia sexual y, sin embargo,
desliza indirectamente un tono pornográfico en el texto. La doble
moral.
Doniger y Kakar obtuvieron la nueva versión directamente
del original, redactado en sánscrito por Vatsyayana, aproximadamente
en el siglo III de nuestra era. Del autor no se sabe prácticamente
nada, salvo que -según revelaciones de los nuevos traductores- lo
escribió en estado de castidad y profunda meditación. Burton,
quien nació en 1821, fue explorador, lingüista, etnólogo,
cazador de tesoros, espía en la guerra de Crimea y especialista
en la búsqueda de textos eróticos. Descubrió el Kama
Sutra en 1842. Dos estudiantes indios le hicieron la traducción
del sánscrito, misma que Burton se encargó de "embellecer"
y a la que agregó un comentario escrito en el siglo XIII por un
erudito de nombre Yashodhara.
Todo el placer
En entrevista con The New York Times, Wendy Doniger
sostuvo que el libro tiene que ser entendido desde la visión que
el hinduismo tiene del mundo y de los tres objetivos que le asigna a la
vida humana: la religión o "dharma"; los acontecimientos mundanos
o "artha"; y el placer o "kama". Desde esta perspectiva ?explica Doniger?
el sexo es parte de la vida tanto como la religión. Por lo mismo,
el Kama Sutra no se reduce ?como es creencia popular? únicamente
al placer sexual, sino al placer en un sentido amplio, que incluye otras
experiencias y sensaciones.
Es justamente Doniger quien remarca las alteraciones realizadas
por Burton al minimizar la importancia que el texto original otorga a la
sexualidad femenina, a la par que la masculina. Doniger, quien lee sánscrito,
efectuó la traduccíón y Kakar, autor de una biografía
ficticia de Vatsyayana, Ascetic of desire (El asceta del deseo),
contribuyó con un texto que acompañará la nueva edición
y en la que ofrece el contexto histórico y social en que fue escrito
el Kama Sutra, término que significa ''tratado del placer''.