Figura controvertida
"Con el tiempo se sabrá valorar la dimensión enorme que tuvo este servidor de la patria, en el transcurso de los últimos 20 años", aseguró este domingo el ministro de Información de Bolivia, Hernán Terrazas, sobre la muerte del ex dictador y ex presidente Hugo Bánzer esta madrugada, a raíz de un cáncer hepático extendido a pulmones y cerebro, que lo alejó del poder constitucional en agosto pasado. Pero otros, como el movimiento 30 Años de Impunidad y la Asociación de Familiares de Desaparecidos, recordaron que Bánzer murió sin revelar el destino de los desaparecidos de su dictadura, de los cuales dijo una vez el ex jefe de Estado que "no eran angelitos". Por su lado, el líder aymará Felipe Quispe dijo que el ex mandatario encabezó "un gobierno sanguinario y racista que odiaba a los indígenas", y en ese sentido recordó una matanza en 1974 contra campesinos que se oponían a medidas económicas de su dictadura.
Por lo pronto, el gobierno decretó duelo oficial por 30 días, mientras que el presidente Jorge Quiroga, correligionario de Bánzer y su vicepresidente hasta hace diez meses, viajó de inmediato a Santa Cruz para ofrecer sus condolencias a la familia del ex gobernante, cuyos restos serán trasladados mañana lunes al palacio prefectural de esa ciudad para recibir honores y luego a la catedral.
Quiroga manifestó su "dolor por la pérdida del líder histórico" de la derechista Acción Democrática Nacionalista y del "ilustre soldado" que en 1971 se hizo del poder apoyado por las fuerzas armadas. En 1997, tras obtener 22 por ciento de los votos, Bánzer fue designado por el parlamento para gobernar constitucionalmente gracias al insólito apoyo político que obtuvo de otros partidos, como el Movimiento de Izquierda Revolucionaria.
El presidente brasileño Fernando Henrique Cardoso lamentó el deceso de ex jefe de Estado boliviano, mientras se informó que el mandatario chileno Ricardo Lagos proyecta viajar este lunes a Bolivia para concurir a los funerales de Bánzer, en cuyo homenaje los principales partidos políticos bolivianos suspendieron por 48 horas sus campañas electorales en Santa Cruz.
Este día, muchos analistas recordaban que, paradójicamente, el éxito contra los cultivos ilícitos durante su gestión, con un récord de destrucción de 38 mil hectáreas de coca en un trienio, evitó que la economía recibiera unos 500 millones de dólares anuales y provocó sangrientos choques entre militares e indígenas productores de la hoja de coca. AFP Y DPA