El gobierno mantendrá prácticamente "austeridad eterna", advierte el CAPEM

El ingreso excedente por el crudo se destinará al pago de deuda, según el fondo petrolero

El decreto impide disponer de esos recursos; no se compensará el recorte al gasto

ISRAEL RODRIGUEZ J.

La alza coyuntural de los precios del petróleo no tendrá beneficios directos para compensar el recorte al gasto público ni en la población, ya que los excedentes, si fueran cuantiosos, se destinarían al pago de deuda, establecen las reglas de operación del Fondo de Estabilización de los Ingresos Petroleros, creado el 15 de noviembre de 2000.

A este respecto, el Centro de Análisis y Proyecciones Económicas para México (CAPEM) aseguró que el gobierno federal mantendrá prácticamente "austeridad eterna", debido al gran peso de la deuda "contingente", que es del orden de 4 por ciento del producto interno bruto (PIB) y ejerce gran presión sobre las finanzas públicas.

De acuerdo con el decreto publicado el 31 de diciembre de 2000 y rubricado por el actual secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, los recursos excedentes que sean obtenidos por un sobreprecio del petróleo serán depositados en el fondo de estabilización petrolera, cuyo objetivo es aminorar el efecto sobre las finanzas públicas y la economía nacional de cambios en el nivel de los ingresos públicos, derivados de movimientos abruptos en los precios internacionales del petróleo.

El acuerdo en torno a las reglas de operación del fondo señalan que "no se utilizarán recursos del fondo cuando el precio del petróleo sea superior al de referencia. Tampoco se utilizarán recursos si los precios del petróleo son inferiores al nivel de referencia hasta en 1.5 dólares de Estados Unidos de Norteamérica".

El decreto también indica que "cuando al cierre del ejercicio fiscal los recursos acumulados en el fondo rebasen los 4 mil millones de dólares de Estados Unidos de Norteamérica, el excedente se trasladará a una subcuenta especial del mismo fondo. El saldo de la cuenta especial no formará parte de los recursos disponibles para cubrir el gasto público autorizado en el Presupuesto de Egresos de la Federación como se señala en el numeral 7 de este acuerdo, y se destinará a amortizar pasivos del sector público".

César Castro Quiroz, director de análisis del CAPEM, explicó que los ingresos extraordinarios por el reciente aumento sólo compensarán los ingresos no obtenidos por la baja plataforma de exportación petrolera y la fortaleza del peso. Precisó que por cada peso que se fortalece el tipo de cambio, el gobierno federal deja de percibir alrededor de 12 mil millones de pesos.

Asimismo, debido a la reducción en la plataforma de exportación de 100 mil barriles de petróleo diarios, el sector público deja de percibir alrededor de 6 mil 500 millones de pesos anuales.

Por ello, de mantenerse un precio promedio del petróleo en 20 dólares por barril, cifra arriba de la proyectada para 2002 por el gobierno federal, que fue de 15.50 dólares por barril, el sector público obtendría alrededor de 105 mil millones de pesos, cifra ligeramente superior a lo estimado por el gobierno, que espera recibir por venta de crudo 98 mil 568 millones de pesos. Es decir, que los ingresos adicionales serán de sólo 6 mil 500 millones de pesos, cifra que no resolverá los grandes compromisos financieros que enfrenta el gobierno.

Mencionó que el gobierno federal estará obligado a mantener una austeridad prácticamente eterna, ya que los requerimientos por los pasivos contingentes como son los del IPAB, los Pidiregas, el rescate carretero, las pensiones del ISSSTE, de cerca de 4 cuatro por ciento del PIB, lo obligará a ser más prudente en el ejercicio del gasto.