Entregan galardón a Luis Barrera, José
María Guardia y Luis Morales Reyes
Reconocen mediación mexicana entre religiosas
y Castro
El gobierno de la isla ha demostrado gran apertura al
permitir el trabajo pastoral, aseguran
JOSE ANTONIO ROMAN
El
gobierno cubano ha demostrado en los hechos una mayor apertura en el respeto
a las garantías individuales, entre ellas la libertad religiosa,
aseguró el ex secretario general adjunto de la Conferencia del Episcopado
Mexicano (CEM), Luis Barrera. "Es indudable que se han ensanchado estas
libertades", dijo.
Señaló que en los años recientes
el presidente Fidel Castro ha permitido una "gran libertad religiosa",
y en la actualidad los cubanos practican y profesan con plena libertad
su fe en las más distintas religiones, que van desde la católica
y judía, hasta iglesias protestantes y afrocubanas.
Luis Barrera, junto con el presidente del episcopado mexicano
y arzobispo de San Luis Potosí, Luis Morales Reyes, y el empresario
José María Guardia recibieron anoche un reconocimiento por
parte de las Hermanas de Santa Brígida, por haber fungido exitosamente
como intermediarios entre dicha orden religiosa y el gobierno del presidente
Castro, no sólo para permitir su ingreso a la isla y realizar un
trabajo pastoral, sino incluso lograr en comodato un antiguo convento ubicado
en La Habana vieja.
El reconocimiento lo entregó la madre superiora
de la orden de origen italiana, Tecla Famiglietti, tras reconocer la apertura
mostrada por el gobierno cubano en materia religiosa.
A sólo unos cuantos meses de la llegada de su congregación
a la isla, señaló que en Cuba se percibe con claridad un
creciente deseo e interés por el Evangelio.
Durante la entrega de los reconocimientos, en que participó
también el agregado político de la embajada cubana en México,
Orlando Silva, la religiosa subrayó que sin la tarea y mediación
de los obispos y del empresario mexicano no podría entender su llegada
a la isla. "Si México no estuviera en medio, no habría sido
posible", dijo en su poco español.
El ex secretario general adjunto de la CEM agregó
que el gobierno cubano no sólo ha trabajado de manera exitosa y
está a la punta en medicina y educación, y en la medida de
lo posible también en ciertas áreas de la tecnología,
sino que ahora además lo hace en el respeto a la libertad religiosa.
"Está permitiendo que el hombre se desarrolle con plenitud, y parte
de este desarrollo ?dijo? es satisfacer sus necesidades religiosas".
Asimismo, recordó que en la carta enviada al papa
Juan Pablo II, en la que acepta el ingreso de esa congregación,
el presidente Castro cita que hay otras 56 órdenes religiosas femeninas
que trabajan en la isla, además de que se compromete expresamente
a darles un trato y atención igual ante la ley.
Aunque no especifica que llegarán nuevas hermandades
a Cuba, "seguramente todo lo que sea para mejorar la calidad de las personas
será en favor de que ingresen más órdenes", dijo Luis
Barrera, quien destacó que en la actualidad hay en la isla un mayor
número de congregaciones femeninas que las existentes en la época
del dictador Batista.
Hay que recordar que en diciembre pasado, tras una larga
negociación entre Fidel Castro y los mediadores mexicanos, quienes
se reunieron varias veces ?la primera de ellas en la casa del empresario
José María Guardia, en diciembre de 2000, cuando el mandatario
cubano asistió a la toma de posesión de Vicente Fox?, el
pasado mes de diciembre fue entregado a la orden religiosa un convento
en La Habana vieja.