También piden la entrega de ganancias acumuladas
Devolución de ahorros hechos desde 1973, exigen petroleros jubilados
ELIZABETH VELASCO C.
De 1999 a la fecha, trabajadores jubilados de la desaparecida refinería 18 de Marzo entablan una demanda civil en contra de la sección 35 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), para exigir la devolución de sus aportaciones a la Asociación de Ahorros y Préstamos de esa sección, así como las ganancias acumuladas desde 1973.
Jorge Alegre Reyes, representante legal de los jubilados pertenecientes a la asociación, señaló que también han entablado una demanda en contra de Petróleos Mexicanos (Pemex), por ser "deudor solidario, ya que ha retenido las aportaciones de jubilados y trabajadores en activo, de 1973 a la fecha, y las entrega al STPRM".
Abundó: "Pemex ha reconocido ante las autoridades la existencia de la asociación, el origen de las obligaciones a cargo de los socios y el rembolso del dinero al STPRM. Sin embargo, se ha negado a dar la información requerida en los juzgados civiles en torno al nombre y el número de trabajadores que aportan a la asociación, el monto de las aportaciones, así como el monto total de las retenciones por concepto de descuentos por préstamos".
Los juicios se ventilan en los juzgados primero y segundo de distrito en materia civil en la ciudad de México, en los expedientes 35/99 y 137/98. Asimismo, en la toca civil número 346/2001 se señala que el entonces apoderado legal de Pemex, Sergio Nettel López, dijo que la paraestatal carece de la información requerida.
La asociación de ahorros se formó en 1973 con un fondo de un millón de pesos, depositados por el entonces dirigente del STPRM, Salvador Barragán Camacho, a favor de los trabajadores la sección 35.
Posteriormente se descontaron las aportaciones a cada uno de los 5 mil jubilados que crearon la asociación y la caja de ahorros.
En 1999, cuando ya era líder del sindicato Carlos Romero Deschamps, sólo quedaban mil 200 socios jubilados, que se retiraron de la asociación por la falta de informes, expuso Jorge Alegre.
En ese año demandaron el rembolso de sus aportaciones y la distribución de los excedentes generados, los cuales estimaban en un millón de pesos por trabajador.