En las acusaciones hay un trasfondo político y se busca debilitar al partido: Sadot

Prepara el PRI su defensa ante el IFE por el presunto desvío de fondos del STPRM

ENRIQUE MENDEZ, CIRO PEREZ Y PATRICIA MUÑOZ

La dirigencia del PRI prepara su defensa legal ante el Instituto Federal Electoral (IFE) para responder a la queja que el 23 de enero presentó el PRD, en la que demandó investigar el presunto desvío de mil 100 millones de pesos de Petróleos Mexicanos (Pemex) al tricolor el año 2000 y la forma como el senador priísta Eduardo Bours canalizó 890 millones de pesos a la campaña priísta de ese año.

El viernes 9 de febrero, el secretario técnico de la Comisión de Fiscalización del IFE, Arturo Sánchez Gutiérrez, envió un oficio a los representantes del PRI, mediante el cual les informa que fue recibida la queja suscrita por Pablo Gómez Alvarez y que se abrió el expediente Q-CFRPAP-01/02PRDvsPRI.

Una vez recibida la notificación, el subsecretario de Elecciones del CEN del PRI y representante del partido ante el instituto electoral, Rafael Ortiz Ruiz, comenzó a redactar un proyecto de defensa y a integrar un expediente con los alegatos priístas, que básicamente versarán respecto de que en su oportunidad el IFE sancionó los ingresos y egresos del Revolucionario Institucional sin encontrar nada irregular.

En entrevista, Ortiz Ruiz afirmó que la queja presentada por Gómez Alvarez al día siguiente que Bours dijo haber conseguido él solo 890 millones de pesos para Francisco Labastida, "está sustentada en el aire", porque se fundamenta exclusivamente en notas periodísticas.

Hasta ahora lo único formal y legal, explicó, son los comunicados de la PGR y de la Contraloría, pero ninguna prueba dura que relacione al partido con la recepción de mil 100 millones de pesos del sindicato petrolero.

"Si hay responsabilidad penal, que actúen contra quien sea. En el PRI no protegemos la impunidad, pero mientras no haya elementos ninguna queja es procedente", sostuvo.

Además, dijo, el IFE no puede iniciar ninguna investigación en contra del partido si no tiene información legal de la PGR que tipifique algún delito. "Pero si se llega a comprobar algo, que no lo sabemos, pediremos ayuda a la Secretaría de Finanzas" del partido.

Desde ahora deslindó al partido de cualquier manejo irregular de recursos porque, afirmó, el PRI "no tiene nada que ver en la relación bilateral Pemex-sindicato".

Una vez que la Comisión de Fiscalización emita una posición respecto de la queja de Gómez Alvarez, el PRI tiene cinco días para responder. Ortiz Ruiz avanza en la integración del expediente. Dijo que como la demanda no tiene sustento "se caerá y el PRD no podrá volver a presentar una queja sobre el mismo tema, al menos no con la misma intención".

El representante perredista solicitó al IFE que determine la responsabilidad del PRI en el manejo irregular de recursos y que aplique una sanción "que en derecho corresponda" al tricolor por violentar el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales.

"No negociamos en lo oscurito"

Mientras, el senador Sadot Sánchez Carreño dijo que para el PRI, independientemente de las investigaciones en curso, hay "un trasfondo político que busca debilitar a nuestro partido".

El legislador declaró que los priístas han advertido "con sorpresa y extrañamiento" que el lenguaje del presidente Vicente Fox "tiene presente de alguna forma la amenaza" cuando advierte que la transición no estará sujeta a chantajes u olvidos.

"No deben confundirse las cuestiones; si hay elementos, las investigaciones deben hacerse. Todas estas filtraciones lo que buscan no es hacer justicia ni ejercitar acción penal, sino el linchamiento, el desprestigio en el escenario político", declaró.

La ley, insistió, no debe ser instrumento para actuar políticamente, porque "la venganza de ninguna manera es justicia y, en este sentido, no aceptamos que mediante expedientes penales se lleven a cabo actuaciones de carácter político".

Sánchez Carreño insistió en que su partido no ha solicitado al gobierno foxista canonjías ni prebendas, y mucho menos pretenda acuerdos "en lo oscurito".

Sin embargo, para el coordinador de los diputados del PAN, Felipe Calderón Hinojosa, el caso de Pemex no se inició por una venganza política y, en alusión a las declaraciones del ex presidente Miguel de la Madrid, sostuvo que no tiene razón cuando afirma que las investigaciones tienen como fin atacar al PRI.

"Discrepo de él, no se trata de un asunto de revancha ni de venganza, se trata de un asunto de ley y de combate a la corrupción. Definitivamente, el que nada debe nada teme, y si este es el caso no debería haber esas reacciones de parte del priísmo cuando interpretan una acción de justicia como revancha", enfatizó el panista.

Por cuanto a las indagatorias en curso, Calderón Hinojosa advirtió que "no debe haber intocables, sean ex presidentes o un ciudadano más".